La conferencia sobre el estado del racismo concluye con una nota de esperanza

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Nov 20, 2013
Cuatro participantes conversan acerca de lo que han aprendido durante la conferencia “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, foro que tuvo lugar los días 15 y 16 de noviembre en la catedral de San Andrés, Diócesis Episcopal de Misisipí, en el centro de la ciudad de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

Cuatro participantes conversan acerca de lo que han aprendido durante la conferencia “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, foro que tuvo lugar los días 15 y 16 de noviembre en la catedral de San Andrés, Diócesis Episcopal de Misisipí, en el centro de la ciudad de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

[Episcopal News Service – Jackson, Misisipí] A juzgar por el informe de las tres rondas de discusiones en pequeños grupos, los participantes del foro “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, que tuvo lugar los días 15 y 16 de noviembre, se marcharon con esperanzas y una renovada dedicación.

Navita Cummings James, presidente del Comité sobre Antirracismo del Consejo Ejecutivo, y el Rdo. Angel Ifill, misionero del ministerio de los negros de la Iglesia, moderaron la discusión final de la reunión en la cual se les pidió a los participantes que consideraran las tres cosas fundamentales que habían aprendido o que habían reforzado durante la reunión, cómo promoverían personalmente la restauración y la comprensión racial y, luego, cómo se ocuparían de combatir el racismo institucional.

El portavoz de uno de los grupos dijo que sus miembros habían convenido en que “la universalidad del dolor” se había visto reforzada por las conversaciones de los últimos dos días. “Debemos ser pacientes con los que no asistirían a un foro como éste”, dio uno de los participantes, al reportar sobre lo que su pequeño grupo había aprendido.

Desde el punto de vista de promover la comprensión y la  reconciliación racial, otro de los participantes dijo que su grupo había estado de acuerdo en que sería importante “trazar su propia narrativa o su propia trayectoria de experiencias raciales [porque] va a ayudarte a llegar a otras personas si tienes clara tu propia historia”.

Más de un participante sugirió que las conversaciones que comenzaron durante la reunión deberían continuar, dicho en las palabras de uno de ellos “ya sea en nuestras iglesias individuales, en la cámara de comercio o en cualesquiera otras agrupaciones de las que podamos formar parte”.

Uno de los participantes más jóvenes hizo notar que debido a la reunión “aun para alguien de nuestro grupo que ha estado en el movimiento durante mucho tiempo, hay una renovada esperanza”.

En sus palabras de clausura, Duncan Gray III, obispo de la Diócesis de Misisipí, hizo notar que “más de unas pocas personas se han preguntado—algunos en alta voz en mi presencia— de lo apropiado de que la Iglesia Episcopal en Misisipí auspicie un diálogo sobre el racismo”.

Diciendo que él entendía esas dudas, Gray recordó que Martin Luther King Jr. dijo durante su famoso discurso “Yo tengo un sueño”, hace 50 años: “Sueño que un día incluso el estado de Misisipí,  sofocado por el calor de la injusticia, sofocado por el calor de la opresión, se transformará en un oasis de libertad y de justicia”.

Gray dijo que él “tendría que reconocer que el lobo aún no se ha echado junto al cordero” en este estado.

El Rvdmo. Duncan Gray Jr., séptimo obispo de Misisipí, hijo del quinto obispo de Misisipí y padre el actual obispo diocesano Duncan Gary III, escucha una ponencia el 16 de noviembre, el segundo día del foro “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, que se reunió en la catedral de San Andrés, de la Diócesis episcopal de Misisipí, en el centro de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

El Rvdmo. Duncan Gray Jr., séptimo obispo de Misisipí, hijo del quinto obispo de Misisipí y padre el actual obispo diocesano Duncan Gary III, escucha una ponencia el 16 de noviembre, el segundo día del foro “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, que se reunió en la catedral de San Andrés, de la Diócesis episcopal de Misisipí, en el centro de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

“No hemos sido transformados en un oasis de libertad y justicia 50 años después, y no obstante, me siento esperanzado porque precisamente soy hijo y natural de este estado conflictivo, heroico, trágico y con frecuencia violento”, señaló.

“Me ilusiona creer que una mirada honesta a nuestro pasado y la disposición a escuchar relatos de individuos y de comunidades que nunca conocimos o quisimos conocer nos conducirán por rutas esenciales a la enmienda e incluso tal vez a la reconciliación”.

El obispo dijo que se sentía ilusionado porque “mientras desentraño las capas de racismo profundamente arraigadas en mi alma —que con frecuencia asumen la forma de caracterizaciones raciales muy personales, a veces inconscientes, dentro de mí— tengo millares de compañeros de viaje a lo largo y ancho de este estado, algunos de los cuales están aquí, que llevan a cabo ese mismo quehacer en extremo doloroso, aterrador y vivificante”.

Gray desafió al resto de la Iglesia y al país [al decir] “si hasta Misisipí, un estado sofocado por la injusticia y la opresión hace 50 años puede hacer esto, ¿por qué no pueden otros?”.

Las sesiones plenarias, los talleres y los debates del 16 de noviembre constituyeron la segunda de las dos jornadas de trabajo dedicadas a examinar el estado del racismo en EE.UU., cuánto ha progresado el país y su población, y a tomar en consideración lo que aún queda por hacer.

El Rdo. Jim Kodera, japonés de nacimiento y primer asioamericano ordenado sacerdote en la Diócesis de Massachusetts, cuenta un testimonio histórico de las dificultades que enfrentaron los asiáticos en Estados Unidos y acerca de los asioamericanos, durante uno de los talleres del 16 de noviembre como parte del foro “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, que se reunió en la catedral episcopal de San Andrés, Diócesis de Misisipí, en el centro de la ciudad de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

El Rdo. Jim Kodera, japonés de nacimiento y primer asioamericano ordenado sacerdote en la Diócesis de Massachusetts, cuenta un testimonio histórico de las dificultades que enfrentaron los asiáticos en Estados Unidos y acerca de los asioamericanos, durante uno de los talleres del 16 de noviembre como parte del foro “Cincuenta años después: el estado del racismo en Estados Unidos”, que se reunió en la catedral episcopal de San Andrés, Diócesis de Misisipí, en el centro de la ciudad de Jackson. Foto de Mary Frances Schjonberg para ENS.

Durante uno de los seis talleres simultáneos de esa mañana, el Rdo. James T. Kodera, profesor de religión de Wellesley College y rector de la iglesia episcopal de San Lucas [St. Luke’s Episcopal Church] en Hudson, Massachusetts, presentó una “narrativa histórica de las dificultades sufridas por los asiáticos en Estados Unidos y por los asioamericanos”. Durante la discusión que siguió con los que asistieron al taller, él sugirió que “debe haber múltiples historias. Tenemos que rechazar cualquier noción de historia establecida, de historia oficial, porque toda historia es selectiva y tiene un propósito”.

“Tienen que escribir juntos nuevas historias”, dijo Kodera, natural de Japón y primer asioamericano en ser ordenado en la Diócesis de Massachusetts. “Creo que es nuestra obligación tener el valor de escribir una historia alternativa de manera que podamos adoptar múltiples historias” a fin de poder asomarnos a un panorama más completo del país.

El foro sobre el estado del racismo fue auspiciado por la Iglesia Episcopal y la Diócesis de Misisipí y tuvo lugar en la catedral episcopal de San Andrés en el centro de Jackson, Misisipí.

La cobertura que hizo ENS de la sesión de apertura del foro el 15 de noviembre se encuentra aquí. Una serie de reflexiones en vídeo hechos por ENS a partir de la conferencia pueden verse aquí.

La transmisión vía Internet del 15 de noviembre, que incluyó un discurso de apertura de la obispa primada Katharine Jefferts Schori y dos paneles de discusión, se puede obtener a solicitud aquí. También se puede obtener una guía para la discusión creada para este foro.

Una bibliografía y otros recursos relacionados con el tema pueden encontrarse aquí.

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducido por Vicente Echerri.