[Comunicado de prensa de la Diócesis Episcopal del Norte de California] Cuando la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito actúe en respuesta a la decisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos hoy, los matrimonios entre personas del mismo sexo volverán a ser legalmente posibles en California. Nuestro estado luego reasumiría su posición con un número creciente de estados que extienden el derecho al matrimonio a todos sus ciudadanos. Como saben, he estado abiertamente a favor de la restauración de tales derechos, que considero una cuestión de derechos civiles básicos. Por lo tanto, estoy entre los que se alegran de esta decisión, como sé que muchos de ustedes lo hacen. También soy consciente de que otros de nosotros pueden pensar de manera diferente sobre este tema, particularmente cuando se trata del tema del matrimonio igualitario en la Iglesia. Que Dios nos ayude a abrazarnos unos a otros en ese respeto y amor con el que estamos comprometidos en las promesas del Santo Bautismo.

Personalmente, también estoy a favor de la igualdad total del matrimonio en la Iglesia, y sigo esperando que así sea. Sin embargo, entiendo y aprecio que hay mucho trabajo por hacer antes del día en que nuestra Convención General enmende sus cánones y liturgias para hacer posible el matrimonio entre personas del mismo sexo en nuestra Iglesia. Mientras tanto, las parejas del mismo género en esta diócesis que están preparadas para casarse a los ojos del estado y que tienen la intención de hacer un pacto fiel y de por vida con Dios, pueden tener sus matrimonios civiles bendecidos en la Iglesia. Como siempre, la decisión de involucrarse pastoralmente depende de cada persona del clero. Aquellos clérigos que elijan oficiar para tal servicio actuarán como agentes del estado para los propósitos del matrimonio, y como clérigos de la Iglesia para la bendición. Se han autorizado los ritos aprobados, debidamente adaptados (sin incluir las liturgias del Libro de Oración Común). Los detalles completos sobre políticas y procedimientos se publicarán en las próximas semanas. Estos serán similares a los materiales actuales disponibles en el sitio web de la Diócesis Episcopal de Maine.

Nuevamente, pido que sigamos abrazándonos mutuamente en el respeto bautismal a medida que avanzamos hacia esta nueva era en nuestra vida juntos. Que Dios lo bendiga y lo guíe, mientras considera su propia respuesta a este cambio. Y que esta Diócesis sea empoderada por el Espíritu Santo para abrazar el don de la unidad de Dios, para enfocarse en su misión y seguir avanzando, en el Nombre de Cristo.