El consejo Consultivo debate sobre una ‘sinfonía de instrumentos’

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Nov 5, 2012

[Episcopal News Service — Auckland, Nueva Zelanda] El Consejo Consultivo Anglicano comenzó aquí el 2 de noviembre (hora local) una discusión  sobre el pasado, presente y posibles futuros de los instrumentos de la Comunión.

La reunión anterior del CCA en Jamaica en 2009 solicitó, por medio de [la resolución] 14.09(g), a la Comisión Permanente Interanglicana sobre Unidad, Fe y Orden (IASCUFO) que estudiara el papel y responsabilidades del arzobispo de Cantórbery, la Conferencia de Lambeth, el Consejo Consultivo Anglicano y la Reunión de los Primados; la razón eclesiológica de cada uno y las relaciones entre ellos, y que lo informaran en esta reunión.

Stephen Pickard, obispo auxiliar de la Diócesis de Canberra y Goulburn, le dijo al Consejo que el informe de 68 páginas titulado “Hacia una sinfonía de instrumentos: una consideración histórica y teológica de los instrumentos de la Comunión Anglicana” es el resultado de lo que se espera sea por lo menos un proceso en dos etapas. Comenzó con la historia y la teología, dijo él, porque “sería difícil, si no imposible” encontrar medios de ampliar los instrumentos sin entender primero su historia.

“El propósito global es explorar la eficacia de los instrumentos de la Comunión y preguntar cómo podemos lograr una armonía más profunda entre los instrumentos. ¿Cómo operan juntos? ¿Cómo podrían ser de manera creativa parte del proceso de evolución de la Comunión Anglicana?”.

“Aún no vemos claramente lo que llegarán a ser”, añadió Pickard, que es el vicepresidente del IASCUFO.

El dijo que el informe sugiere que los instrumentos sean vistos como “dones de la Comunión y para la Comunión”.

“Los instrumentos de la Comunión pueden perder su foco”, añadió Pickard. “Su interés fundamental es la misión de Dios. Su horizonte debe ser la obra de Dios en el mundo. Todas las deliberaciones, discusiones [y] deseos de alcanzar un discernimiento colectivo, deben dirigirse a la obra de Dios en el mundo”.

Un resumen de los temas esenciales del informe sugiere también que la Comunión “debe recobrar una relación más sólida entre los instrumentos de la Comunión”, no buscar una renovación sino “una armonía más profunda”.

El informe detallado advierte en varios lugares que no existe ningún organismo en la Comunión con “la autoridad legislativa para determinar asuntos de fe y doctrina para toda la Comunión” y que ningún organismo semejante puede [existir] “en una comunión de iglesias donde el énfasis recae en la autonomía local y en los vínculos de interconexión a través de los cuales se construye una fraternidad de iglesias más amplia”.

Este es el caso pese a que, en las palabras del párrafo 5.3.4 “recientes controversias en la Comunión han llevado a muchos a reclamar sanciones, y [la existencia] de una autoridad con poder y capacidad de imponer decisiones”.

Los instrumentos actuales “no pueden administrar una disciplina que sea legalmente obligatoria, tan sólo pueden ejercer la fuerza de la persuasión moral”, dice el informe, que define esa última como “una disciplina de persuasión y mutua responsabilidad”.

“Algunos dirán que no es mucho y querrán algo más fuerte, pero eso exigiría un tipo distinto de Comunión Anglicana” concluye el párrafo 5.3.5.

En el párrafo 5.4.4, el informe destaca la presencia del laicado en el CCA y sugiere que si el CCA fuera a trabajar con la Reunión de los Primados para establecer objetivos estratégicos para la comunión “tal movimiento podría ir mano a mano con una compromiso y participación más profundos del laicado en el anglicanismo mundial”.

Las provincias deben desarrollar “una teología anglicana de la comunión… partiendo desde dentro de las fracturas y heridas de la vida del cuerpo de Cristo”, sugiere el informe.

“Puesto que el cuerpo de Cristo es una realidad inconclusa y su peregrinación se lleva a cabo en medio de los problemas del ser humano —junto con todos sus conflictos, fricciones, fracturas y errores— los instrumentos de la Comunión serán señales de una Comunión aún irrealizada por la que esperamos y oramos”, dice el estudio, haciendo notar que “resulta grandemente atractivo” intentar resolver disputas  “ya sea con demasiada rapidez o a través de soluciones que son esencialmente políticas o eclesiásticas, o de ambas categorías, pero que carecen de un elemento teológico fundamental.

La herida en el anglicanismo necesita algo más que un “estuche para reparar pinchazos”, dice el párrafo 6.6.8, añadiendo que “la restauración y la reparación sólo pueden lograrse mediante la atenta escucha y la tolerancia… no hay soluciones expeditas a la necesidad de escuchar atenta y respetuosamente”.

Los instrumentos “están singularmente colocados para recordarle a la Comunión, deliberada y proféticamente, su verdadero propósito en el reino de Dios”  siendo “menos reactiva y más proactiva en su labor”.

“Sin embargo, esto exige un nuevo nivel de cooperación de unos con otros y con los propósitos de Dios”, concluye el informe. “A través de ese compromiso cooperativo con Dios y de los unos con los otros, la Iglesia será capaz de progresar hacia una mayor sinfonía de los instrumentos de la Comunión”.

El 3 de noviembre, los miembros del CCA tendrán otra discusión sobre el informe.

Antecedentes del CCA
El CCA es uno de los cuatro instrumentos de la Comunión, siendo los otros  el arzobispo de Cantórbery (que sirve como presidente del CCA), la Conferencia de Lambeth de Obispos Anglicanos y la Reunión de los Primados.

Instituido en 1969, el CCA incluye a clérigos y laicos, al igual que a obispos, entre sus delegados. La membresía [del CCA] consta de una a tres personas de cada una de las 38 provincias de la Comunión Anglicana, dependiendo del tamaño de la feligresía de cada provincia. En los casos donde hay tres miembros, hay un obispo, un presbítero y un laico. En los casos donde se nombran menos miembros, la preferencia se le da a los laicos. La Constitución del CCA puede encontrarse aquí.

El Consejo se reúne cada tres o cuatro años y la reunión de Auckland es la 15ª desde su creación.

La Iglesia Episcopal está representada por Josephine Hicks, de Carolina del Norte; la Rda. Gay Jennings, de Ohio y el obispo Ian Douglas de Connecticut.

Jefferts Schori asiste a la reunión en su carácter de miembro del Comité Permanente de la Comunión Anglicana, que se reunió aquí antes del comienzo de la reunión del CCA.  Douglas también es miembro del Comité Permanente.

Una lista completa de los participantes en la 15ª reunión del CCA se encuentra aquí.

Toda la cobertura que ha hecho ENS del CCA15 se encuentra aquí.

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es editora y reportera de Episcopal News Service. Traducido por Vicente Echerri.