Las personas de fe llamadas a ser activistas del medioambiente

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Apr 24, 2012

Bonnie Anderson, presidente de la Cámara de Diputados, hace una intervención durante el programa "Encuentro de la pobreza y el medioambiente", una transmisión en directo por Internet desde la catedral episcopal de San Marcos en Salt Lake City, Utah. Entre los oyentes se encuentran, a la izquierda, George Handley, profesor de humanidades en la Universidad de Brigham Young, y Forrest Cuch, director ejecutivo de Ute Tribal Enterprises. ENS, Foto de Mary Frances Schjonberg

[Episcopal News Service – Salt Lake City, Utah] Los participantes en el programa de la Iglesia Episcopal “El encuentro de la pobreza y el medioambiente”, que tuvo lugar el 21 de abril, convinieron en que las personas de fe pueden y deben desempeñar un papel importante en enseñar a las comunidades a ser buenos vecinos y mayordomos de la creación.

“En las tradiciones religiosas abrahámicas, la pobreza confronta el sueño divino de la abundancia: de un banquete celestial en una tierra de paz con justicia”, dijo la obispa primada, Katharine Jefferts Schori, en sus palabras de presentación.

“Los anticuerpos de la pobreza comienzan a formarse cuando los miembros de la comunidad descubren que su común humanidad y dignidad son interdependientes”, dijo ella, instando a las personas a comenzar por “optar por advertir y hacer algo respecto a la pobreza en nuestro medio”.

El programa de dos horas de duración fue transmitido en directo vía Internet desde la catedral de San Marcos [St Mark’s Cathedral], de la diócesis de Utah, en Salt Lake City. Las estadísticas mostraron que 700 computadoras recibieron la transmisión; por lo menos 50 de esas computadoras fueron usadas por grupos que vieron la transmisión. La sesión estará disponible a solicitud y contará con un manual del facilitador y con materiales para optimizar la recepción y la participación. El texto de las palabras de Jefferts Schori se hará público cuando la versión por encargo de la transmisión esté disponible.

de PBS, a la derecha, hace una pregunta durante el programa “Encuentro de la pobreza y el medioambiente”. El evento de dos horas de duración se transmitió en directo vía Internet desde la catedral episcopal de San Marcos en Salt Lake City, Utah. ENS, Foto de Mary Frances Schjonberg.”]El evento, que tuvo lugar el día antes del Día de la Tierra, constó de dos paneles moderados por Kim Lawton del noticiero semanal de ética y religión [Religion & Ethics NewsWeekly] de PBS.

Durante el primer debate sobre la pregunta de si las iniciativas de sostenibilidad pueden sacar a las personas de la pobreza, Bonnie Anderson, presidente de la Cámara de Diputados, les recordaba a los oyentes que la gente de fe cuenta con la unidad de propósito que es fundamental para organizar la comunidad. “Contamos con la unidad de la regla de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos”, dijo. “El problema es que no conocemos muy bien a nuestros prójimos”.

Forrest Cuch, director ejecutivo de Ute Tribal Enterprises, dijo a los participantes que “lo que más nos perturba es que toda esta degradación [ambiental] ha causado muchísimo daño a nuestra gente hasta el grado de la desesperanza”. Él definió esa desesperanza como “nuestro problema más amenazante” y dijo que los líderes tribales están tratando de ayudar a su gente a reconectarse con las creencias tradicionales.

“Les estamos recordando lo que alguna vez fueron”, agregó. “Mi pueblo proviene de hermosas partes de este país… éramos un pueblo muy feliz, muy sano y éramos un pueblo que se autosostenía”, y estábamos “profundamente conectados con la tierra”.

George Handley, profesor de humanidades de la Universidad de Brigham Young, dijo durante el mismo debate que la religión ha sido históricamente un obstáculo para la mayordomía medioambiental, pero “cada tradición religiosa tiene principios sagrados que viviéramos a su altura y nos adhiriéramos a ellos serían de gran beneficio para la tierra”. Él sugirió que la adhesión individual y colectiva a esos principios, así como una labor que trascienda las fronteras ecuménicas e interreligiosas, tales como la del foro del 21 de abril, “desatan una enorme cantidad de energía espiritual”.

Handley dijo anteriormente que había encontrado “un misterioso obstáculo teológico” que impedían a las personas prestarle atención a asuntos tales como las fuentes de energía alternativa. Algunas personas le han dicho que les parecería una ingratitud hacia Dios si no usaran para su beneficio los dones de Dios del petróleo y el gas [natural].

“Simplemente me gustaría señalarle a la gente que el sol mismo es un don de Dios, el viento, la energía geotérmica -estas son extraordinarias fuentes de energía que pertenecen también a la misma categoría de dones de la creación”, afirmó. “No creo que ninguna teología sea responsable si no nos acordamos de nuestra propia responsabilidad de ser creativos y de hacer ajustes cuando nos damos cuenta que lo que hacíamos ya ha dejado realmente de funcionar”.

Durante el segundo panel sobre el problema de reducir las consecuencias de la salud ambiental para los que se encuentran en la pobreza, el Dr. Gerry Hardison, director del hospital de la Misión Maseno en Kenia, y misionero de la Iglesia Episcopal, instó a los participantes a asumir una visión a largo plazo en defensa del medio ambiente. Dijo que la cuestión es si “vamos a invertir en el mundo después de nuestra muerte o no”.

“Es una inversión que significa sacrificio; los dividendos son enormes, pero ustedes no van a verlos personalmente”, dijo, provocando un aplauso.

El Rdo. Michael Livingston, director de la Iniciativa de la Pobreza del Consejo Nacional de Iglesias, dijo que las personas de fe “se ven confrontadas por esta tajante demanda de actuar con la mayor responsabilidad hacia la creación de Dios”.

Cecilia Calvo, coordinadora del proyecto de justicia medioambiental de la Conferencia de Obispos Católicos [Romanos] de EE.UU., expresó su acuerdo con este punto al decir “esto no es radical, esto no es nuevo para nosotros. El cuidado de la creación de Dios comenzó con el Génesis.

“Para nosotros como pueblo de fe ésta es una parte esencial de quienes somos. Es algo sencillo”, apuntó. “No es algo nuevo; no es una moda pasajera”.

— La Rda. Mary Frances Schjonberg es editora y reportera de Episcopal News Service. Traducido por Vicente Echerri.