[Servicio de Noticias de la Comunión Anglicana] Los anglicanos de Nueva Zelanda se han unido a los defensores de los refugiados para dar la bienvenida a una expansión del programa piloto de patrocinio de refugiados de organizaciones comunitarias del gobierno, mientras piden un plan más justo para permitir que los refugiados más vulnerables reciban ayuda de las iglesias.

El presupuesto de Nueva Zelanda 2020 verá aumentar el número de plazas piloto de 25 en 2018 a 150 de 2021 a 2023. Pero los anglicanos están desafiando los límites sobre quién puede ir a Nueva Zelanda bajo el esquema.

El primer piloto de patrocinio de organizaciones comunitarias para refugiados (CORS) se lanzó en 2017 en respuesta a los llamados de las iglesias anglicana, católica y bautista de un modelo de patrocinio en el que las comunidades apoyan directamente a los nuevos refugiados para que se establezcan. Esa promoción se basó en el exitoso plan CORS de 40 años de duración en Canadá, donde los grupos religiosos y comunitarios han asumido desde hace mucho tiempo la responsabilidad de albergar a las familias de refugiados y ayudarlas a construir una nueva vida.

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