Programa, Presupuesto y Finanzas se prepara para escuchar a la Iglesia

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Mar 9, 2015

[Episcopal News Service – Linthicum Heights, Maryland] El Comité Permanente Conjunto de Programa, Presupuesto y Finanzas (PB&F) de la Iglesia Episcopal concluyó sus tres días de reuniones aquí dispuesto a escuchar las opiniones de la Iglesia acerca de la labor que debe hacerse a escala denominacional en los próximos tres años y cómo pagar por la misma.

Stephen Lane, obispo de la Diócesis de Maine y vicepresidente del Comité Permanente Conjunto sobre Programa, Presupuesto y Finanzas, toma nota el 24 de febrero mientras los miembros del comité informan acerca de las exploraciones iniciales del anteproyecto de presupuesto del Consejo Ejecutivo. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Stephen Lane, obispo de la Diócesis de Maine y vicepresidente del Comité Permanente Conjunto sobre Programa, Presupuesto y Finanzas, toma nota el 24 de febrero mientras los miembros del comité informan acerca de las exploraciones iniciales del anteproyecto de presupuesto del Consejo Ejecutivo. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Ese proceso de escucha conformará la preparación del presupuesto que el Comité del Presupuesto de la Convención General propondrá en la reunión de la Convención que sesionará en Salt Lake City del 25 de junio al 3 de julio.

El PB&F se preparó para la fase de escucha de su labor recibiendo algunos informes —y haciendo algunas indagaciones— por su cuenta antes de recibir el anteproyecto del presupuesto trienal 2016-2018 que el Consejo Ejecutivo aprobó el mes pasado. (la Regla Conjunta II.10.c.iii de la Convención General manda que el Consejo Ejecutivo le entregue al PB&F un anteproyecto del presupuesto no menos de cuatro meses antes del comienzo de la Convención General, esencialmente a más tardar en febrero del año de la convención).

Stephen Lane, obispo de la Diócesis de Maine y vicepresidente del PB&F, le dijo al comité a principios de la reunión que “estamos en una modalidad receptiva”.

Mark Hollingsworth, obispo de la Diócesis de Ohio y presidente del Comité Permanente Conjunto sobre Finanzas para la Misión (FFM), y la Rda. Susan Snook, de Arizona, que preside el subcomité del presupuesto del FFM, le presentaron a los miembros del PB&F una detallada explicación del anteproyecto presupuestario. El comité dedicó tiempo entonces a estudiar los supuestos y asignaciones renglón por renglón, y sus asuntos más amplios.

Esos asuntos más amplios incluían el papel del presupuesto en orientar a la Iglesia a través de una época de cambio y el deseo de parte de mucha gente de que la estructura denominacional funcionara de una manera diferente para responder mejor a los retos que enfrenta la Iglesia. El comité también enfrenta la incertidumbre de confeccionar un presupuesto mientras la Iglesia considera las recomendaciones sobre cambios estructurales que le hiciera a la Convención General el Equipo de Trabajo para ‘Reinventar’ la Iglesia Episcopal. Esas recomendaciones se presentarán en Salt Lake City. Algunos de los otros comités, comisiones, agencias y juntas de la Iglesia también podrían someter cambios estructurales a la consideración de la Convención este verano, como podrían hacerlo los diputados, los obispos y las diócesis por medio de resoluciones.

El Rvdmo. Mark Hollingsworth, obispo de la Diócesis de Ohio y presidente del Comité Permanente Conjunto sobre Finanzas para la Misión del Consejo Ejecutivo, hace un comentario durante la sesión plenaria de Programa, Presupuesto y Finanzas el 24 de febrero, mientras la Rda. Canóniga Mally Lloyd, de Massachusetts, y presidente del PB&F, presta atención. La Rda. Susan Snook, de Arizona, a la izquierda, preside el subcomité del presupuesto del FFM. Ella y Hollingsworth le pasaron el anteproyecto del presupuesto del Consejo al PB&F durante la reunión del 23 al 25 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

El Rvdmo. Mark Hollingsworth, obispo de la Diócesis de Ohio y presidente del Comité Permanente Conjunto sobre Finanzas para la Misión del Consejo Ejecutivo, hace un comentario durante la sesión plenaria de Programa, Presupuesto y Finanzas el 24 de febrero, mientras la Rda. Canóniga Mally Lloyd, de Massachusetts, y presidente del PB&F, presta atención. La Rda. Susan Snook, de Arizona, a la izquierda, preside el subcomité del presupuesto del FFM. Ella y Hollingsworth le pasaron el anteproyecto del presupuesto del Consejo al PB&F durante la reunión del 23 al 25 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Y la Convención y el PB&F también están conscientes de que el 27º. Obispo primado, que debe ser electo en esta reunión de la Convención, podría proyectar una nueva visión para la Iglesia durante su período de nueve años y aun después.

También durante la reunión aquí en Maryland, los miembros del PB&F escucharon a la obispa primada Katharine Jefferts Schori, a la presidente de la Cámara de Diputados Gay Jennings, al director de operaciones, obispo Stacy Sauls y al director ejecutivo de la Convención General Rdo. Canónigo Michael Barlowe describir sus enfoques para el presupuesto 2016-2018 y el proceso a seguir para crearlo.

Jefferts Schori instó al comité a seguir pensando en crear el presupuesto en torno a esas cosas que las estructuras denominacionales de la Iglesia pueden hacer mejor o de manera más apropiada. Algunos de los tipos de trabajo que ella sugirió fueron los de apoyar el desarrollo hacia la mutua responsabilidad e interdependencia de los miembros individuales e institucionales de la Iglesia; administrar los recursos de la Iglesia, incluidas su tradición de toma de decisiones corporativa, finanzas, propiedad, reputación, historial, normas litúrgicas y tradiciones, y lo que ella llamó normas de los límites, tales como antirracismo, inclusión y disciplina del clero. Jefferts Schori también citó el fomentar relaciones con otras iglesias y comunidades religiosas, así como relaciones con gobiernos e instituciones supranacionales como las Naciones Unidas.

La Rda. canóniga Cornelia Eaton, miembro del PB&F y proveniente de Navajolandia, eleva la hostia en el momento de la fracción del pan durante la eucaristía del 25 de febrero. Eaton, que es canóniga del Ordinario en Navajolandia, fue ordenada sacerdote el 7 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

La Rda. canóniga Cornelia Eaton, miembro del PB&F y proveniente de Navajolandia, eleva la hostia en el momento de la fracción del pan durante la eucaristía del 25 de febrero. Eaton, que es canóniga del Ordinario en Navajolandia, fue ordenada sacerdote el 7 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

La Obispa Primada encomió la labor realizada en los últimos trienios para desarrollar una “visión coherente de en qué consiste la misión; que consiste en edificar el reino de Dios en nuestro propio tiempo”. Ella advirtió que esta visión se afirma cada vez más en las Cinco Marcas de la Misión de la Comunión Anglicana. El anteproyecto presupuestario 2016-2018 se arma en torno a la estructura que ofrecen las marcas, tal como en el presupuesto de 2013-2015.

Jennings le recordó al comité que “nuestra mayordomía del dinero es un asunto espiritual y que el presupuesto es un documento profundamente teológico”.

Ella también le advirtió a los miembros que durante el debate del presupuesto había “espacio para desacuerdos, malentendidos e incluso confusión” y los instó a “examinar las decisiones presupuestarias usando las lentes de cómo podemos potenciar, equipar y apoyar a las congregaciones de todas las maneras posibles”.

“Hagan las preguntas difíciles, miren con nuevos ojos, prevean las preguntas de diputados y obispos, recuerden a los pobres y a los desatendidos, y dejen que Jesús sea vuestro compañero”, les dijo ella.

Sauls dijo que él creía que “la Iglesia existe para hacer dos cosas: servir a los pobres crear siervos para los pobres”.

Él le contó al comité la historia de San Lorenzo de Roma, un diácono del siglo III, a quien un prefecto romano le ordenó traerle el tesoro de la Iglesia. El prefecto esperaba recibir el dinero y la propiedad de la Iglesia, incluidas las vestimentas y los vasos de la comunión hechos de metales preciosos y joyas. En lugar de eso, el día señalado, Lorenzo reunió ante el prefecto a los pobres de Roma y fue martirizado por su respuesta.

Samuel Gould, miembro del PB&F, administra la comunión al obispo Stacy Sauls, director de operaciones de la Iglesia, durante la eucaristía del 25 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Samuel Gould, miembro del PB&F, administra la comunión al obispo Stacy Sauls, director de operaciones de la Iglesia, durante la eucaristía del 25 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

“Esto es algo tremendamente importante para nosotros de recordar”, dijo Sauls. “La Iglesia tal como yo la veo, en tanto administra sus propiedades que, aunque rara vez nos parece así, son vastas, existe para ser la administradora de los pobres”.

Barlowe dijo “necesitamos una Iglesia sana, creciente, amorosa, servicial y transformadora en todas las instancias de su ser”.

Los miembros del PB&F “tienen la responsabilidad crítica de ayudar a la Convención General a considerar cómo el presupuesto denominacional puede fortalecer e inspirar a toda la Iglesia en [la tarea] de restaurar a las personas a la unidad con Dios y a unos con otros en Cristo”.

Por tanto, dijo él, elaborar el presupuesto a través de las Cinco Marcas de la Misión dirige la Iglesia a ese objetivo.

“Pero, con cualquier sistema de clasificación, las Cinco Marcas de la Misión pueden convertirse en un filtro muy confuso si nos esforzamos demasiado en hacer que algo se ajuste a las marcas y luego dejamos otras cosas fuera de las marcas”, agregó.

Él instó al comité a confrontar esa posible confusión y a explicarle a la Iglesia cómo esas partidas presupuestarias clasificadas como gastos de las Cinco Marcas de la Misión y las que quedan al margen de esa estructura “trabajan juntas para servir a la misión de la Iglesia”.

Kurt Barnes, tesorero de la Iglesia episcopal, responde a una pregunta. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Kurt Barnes, tesorero de la Iglesia episcopal, responde a una pregunta. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Tal como se espera en esta etapa del proceso presupuestario, el PB&F no hizo cambios en el anteproyecto de presupuesto del Consejo. La Rda. Canóniga Mally Lloyd, de Massachusetts, presidenta del PB&F, recordó el evangelio para el primer domingo de Cuaresma, correspondiente al día anterior 22 de febrero, en el cual Jesús es tentado en el desierto durante 40 días.

“Nuestra tentación aquí en los próximos días es que intentemos empezar a juguetear con las coas que están en el presupuesto como si nos pertenecieran, a tratar de responder a nuestras propias inclinaciones internas respecto a cómo debemos financiar las diferentes partes de la Iglesia y a responder a las personas que ya han comenzado a hablarnos”, dijo ella.

Lloyd agregó que el propósito de la reunión era, por el contrario, estudiar el anteproyecto presupuestario y atender a lo que tenían que decir Hollingsworth, Snook y otros miembros del personal denominacional que estaban presentes, de manera que los miembros del comité pudieran entender la propuesta del Consejo y estar preparados para recibir los comentarios de la Iglesia.

“Jesús fue tentado durante 40 días”, le recordó ella al comité. “Nosotros tenemos 117 días. “Cíñanse los lomos”.

El período de escucha del PB&F se presentará inicialmente de dos modos fundamentales. Primero, los miembros del comité aceptarán comentarios y preguntas mientras hacen presentaciones del presupuesto a los sínodos previos a la Convención General a punto de comenzar en cada una de las nueve provincias de la Iglesia. Segundo, un proceso de comentarios basados en la web abierto para toda la Iglesia debe estar disponible en el transcurso de la semana.

La Rda. canóniga Victoria Heard, de Dallas, hace una pregunta durante una sesión plenaria del PB&F el 24 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

La Rda. canóniga Victoria Heard, de Dallas, hace una pregunta durante una sesión plenaria del PB&F el 24 de febrero. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Las sesiones del comité para escuchar proceden a partir de las encuestas acerca del presupuesto que ha llevado a cabo el Consejo Ejecutivo y su comité de FFM, junto con las reacciones que el FFM recibió luego de publicar una versión preliminar de su anteproyecto del presupuesto el otoño pasado.

Una vez en Salt Lake City, la fase de escuchar del PB&F concluirá con dos audiencias. La primera en la noche del 25 de junio se concentrará en los ingresos que el anteproyecto del presupuesto supone que estarán disponible en el trienio 2016-2018. La segunda audiencia a la noche siguiente se centrará en cómo se gastaría el dinero durante esos tres años.

El PB&F usará los comentarios que reciba, así como el anteproyecto del presupuesto del Consejo y cualquier legislación aprobada o sujeta a la consideración de la Convención General para crear una propuesta presupuestaria final. Ese presupuesto debe presentarse a una sesión conjunta de la cámaras de Obispos y Diputados a más tardar el tercer día antes de la clausura de la Convención. Según un calendario provisional de la Convención, esa presentación debe tener lugar a las 2:15 P.M. (MDT u hora de verano de la montaña) el 1 de julio.

Las dos cámaras debatirán y votarán luego sobre el presupuesto por separado. Ambas cámaras deben aprobar la misma versión del presupuesto, la cual entra en vigor al comienzo de 2016. El Consejo Ejecutivo con frecuencia tiene que revisar cada uno de los tres presupuestos anuales del trienio en dependencia de los cambios que se produzcan en ingresos y egresos.

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri.