[Anglican Journal] En la orientación producida durante la primera ola de la pandemia de COVID-19 en abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) fue enfática: “Los líderes religiosos, las organizaciones religiosas y las comunidades religiosas pueden desempeñar un papel importante para salvar vidas y reducir las enfermedades relacionadas a COVID-19 ".

A medida que Canadá comienza a lanzar vacunas en medio de una segunda ola devastadora, las autoridades sanitarias se hacen eco una vez más de la OMS. Las organizaciones religiosas como la Iglesia Anglicana de Canadá, dicen, pueden desempeñar un papel vital en el apoyo a la vacunación.

El potencial de la iglesia para reforzar la lucha contra el virus se puede sentir en el oeste de Canadá, que ha tenido algunas de las tasas de infección más altas del país. Las comunidades indígenas se han visto especialmente afectadas; las personas de las Primeras Naciones representan hasta la mitad de todas las hospitalizaciones en Manitoba, según Tom Wong, director médico de salud de Indigenous Services Canada.

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