La militancia episcopal es terreno común para dos legisladores de Kansas de opuestas posiciones políticas

Por David Paulsen
Posted Jul 18, 2017
Lonnie Clark and Brandon Whipple

El representante republicano Lonnie Clark, a la izquierda, y el representante demócrata Brandon Whipple se cree que son los únicos episcopales en la Asamblea Legislativa de Kansas. Foto de Melodie Woerman/Diócesis de Kansas

[Episcopal News Service] Los representantes estatales de Kansas Brandon Whipple y Lonnie Clark parecería a primera vista que tienen poco en común. Whipple es un joven trasplantado a Kansas con una familia en aumento, joven también, en tanto Clark es un jubilado que se crió en el estado.

Sus diferentes procedencias se extienden a sus posiciones políticas: Whipple es demócrata y Clark es republicano. Pero los dos hombres tienen una conexión religiosa. Ambos son episcopales y se cree que sean los únicos dos en la legislatura de tiempo parcial de Kansas.

Cada uno de ellos se incorporó a la Iglesia Episcopal en años recientes, y cada uno dice que sus valores religiosos conforman sus posiciones políticas, a veces de manera sutil y a veces abiertamente.

“Desde mi punto de vista, al menos [debido a] mi filosofía sobre el cristianismo y al ser cristiano, intento tratar a todo el mundo con equidad ya sea en la Cámara de Representantes o en mis relaciones con el prójimo”, dijo Clark en una entrevista telefónica con Episcopal News Service.

Clark, de 73 años, trabajó como administrador de atención sanitaria y entrenador de la Seguridad Nacional hasta su jubilación. Tiene varios hijos mayores y nietos jóvenes y vive en Junction City, donde uno de los principales asuntos políticos es la preservación de empleos en la vecina base del Ejército, Fort Riley.

Whipple, de 34 años, representa un distrito de Wichita, la mayor ciudad de Kansas, y él y su esposa tienen dos hijos pequeños, y un tercero que está por llegar.

Clark y Whipple se encuentran en lados opuestos de la [Cámara de Representantes] de un estado en que los republicanos controlan la legislatura y el gobierno, pero se encontraron del mismo lado en una importante votación el 6 de junio, al lograr invalidar el veto del gobernador Sam Brownback  del presupuesto estatal. El plan de reducción de impuestos de Brownback había suscitado la crítica bipartidista por no producir un robusto crecimiento económico, y algunos republicanos se unieron a los demócratas  en rechazar las reducciones. La sesión legislativa de 2017 concluyó días más tarde ese mes.

Los dos legisladores también se relacionaron por cuenta de su compartida fe episcopal luego de que aparecieran juntos en un artículo del boletín de la Diócesis de Kansas. La religión se ha convertido en un cómodo punto de partida para la conversación.

“No sé si habría tenido una oportunidad de realmente conocerlo, pero ahora que la tengo, me siento mucho más cerca de él”, dijo Whipple a ENS, añadiendo que él respeta a Clark por defender sus valores en el pleno de la Cámara. “Cuando él habla, es sobre algo que verdaderamente le importa”.

Los valores cristianos de Clark se originan en la fe bautista de su infancia. Esa fe lo acompañó hasta la adultez, pero después  él se convirtió al catolicismo romano, gracias en parte a los capellanes católicos que conoció mientras prestaba su servicio militar en Vietnam.

A su regreso de la guerra, su carrera le llevó alrededor del país, desde Des Moines, Iowa, hasta Birmingham, Alabama. Se jubiló en 2004, pero más tarde fue a trabajar para el Departamento de Seguridad Nacional en el adiestramiento de agentes federales aéreos. Finalmente regresó a Kansas y se jubiló definitivamente.

El primer matrimonio de Clark terminó en divorcio, y cuando él regresó a Kansas, se encontró a la mujer que él llama “el amor de mi vida”, una antigua noviecita de secundaria cuyo primer marido había fallecido. Ella es episcopal de toda la vida y ambos se casaron en una iglesia episcopal en 2015.

Clark, que está en su segundo período como representante y que fue electo por primera vez en 2014, ha sido [un miembro] activo en la iglesia episcopal del Pacto [Episcopal Church of the Covenant] en Junction City, donde incluso llegó a ser parte de la junta parroquial como guardián menor. Pero él dijo que no es el tipo de político que invoca gratuitamente  sus creencias cristianas para enfatizar un argumento, y que no ve su fe como un factor decisivo de su labor política, “que no sea tratar a las personas con dignidad y con respeto”.

No obstante, él sí cree que esa fe lo ayuda a ver a las personas como algo más que republicanos o demócratas. “Creo que mi fe es responsable en alguna medida que yo pueda funcionar más allá de la frontera del partido”, afirmó.

Whipple fue electo por primera vez a la Cámara en 2012. Ahora se encuentra en su tercer período, tiene un puesto en el liderazgo del partido, como presidente del la agenda parlamentaria y asiste a la iglesia episcopal de Santiago Apóstol  [St. James Episcopal Church] en Wichita.

“Tuvimos un foro de adultos acerca de las Bienaventuranzas, y creo que es un sumario político” dijo Whipple. “‘Bienaventurados los pobres en espíritu. Bienaventurados los que lloran. Bienaventurados los mansos”.

“Cuando se trata de oportunidades en nuestro estado debemos cerciorarnos —y creo que eso va parejo con los valores de la Iglesia Episcopal— debemos cerciorarnos de que hoy oportunidades para todos”.

Whipple creció en Nuevo Hampshire. No fue hasta que estaba en la escuela secundaria que se sintió atraído [a militar] en una tradición religiosa. Un amigo suyo tenía un tío que era sacerdote católico romano, y asistían juntos a la iglesia del tío. Whipple fue bautizado a los 17 años y posteriormente confirmado en la Iglesia Católica Romana.

Como estudiante universitario, se ofreció de voluntario para pasar un año en Kansas trabajando con niños en situaciones de riesgo a través de AmeriCorps. Se enamoró del estado y decidió quedarse cuando pasó el año, trasladándose luego a la Universidad del Estado en Wichita.

Su esposa, a quien él conoció en Kansas, se crió como catolicorromana, y ambos asistieron a una iglesia católica en Wichita durante un tiempo. Terminaron en la Iglesia Episcopal en parte por razones políticas, dijo Whipple.

Un sacerdote en la iglesia católica a la que habían estado asistiendo a veces incluía opiniones partidistas en sus homilías, contó Whipple. Lo mortificaban las insinuaciones del sacerdote de que los republicanos eran más auténticamente cristianos que los demócratas, un mensaje que también divulgaba un grupo de presión de Kansas que presumía de representar los intereses católicos.

“Estaban equivocados. Pintaban a todos los demócratas de una manera tendenciosa”, dijo Whipple, añadiendo que él conserva un profundo respeto por la tradición católica.

En 2015, él y su esposa visitaron la iglesia de Santiago Apóstol y encontraron que era un nuevo y acogedor hogar espiritual. También les gustó que, debido a que la Iglesia Episcopal ordenaba mujeres, habría modelos femeninos en el clero si llegaban a tener una hija. (Ellos decidieron no saber el sexo de su nuevo bebé hasta que naciera. El bebé, que nació después de la entrevista de Whipple con ENS, es varón, según la Diócesis de Kansas).

“Separar la política de la Iglesia de la política partidaria era parte de nuestro objetivo, al mismo tiempo que manteníamos nuestros valores”, explicó Whipple.

Al igual que Clark, Whipple dijo que él no suele hacer ostentación de su militancia episcopal, aunque él destacó los valores de la Iglesia cuando se pronunció a principios de este año en contra de una propuesta de moratoria estatal sobre los refugiados.

En medio de un intenso debate paralelo en el ámbito federal sobre las políticas del gobierno de Trump hacia los refugiados, el proyecto de ley de una moratoria en Kansas partió de un comité de la Cámara en marzo, pero no prosperó después de que algunos legisladores, Whipple entre ellos, manifestaran sus reservas.

“Nosotros como nación estamos yendo de la política de la razón a la política del temor”, dijo Whipple, según un informe de Associated Press. Clark votó a favor de la enmienda de Whipple que buscaba proteger la labor de reasentamiento de las organizaciones religiosas, aunque la enmienda fue rechazada. El proyecto de ley fue devuelto al comité, y allí feneció.

Whipple le dijo a ENS que el debate sobre la moratoria a los refugiados fue “uno de los mayores choques de mi fe personal con la política”.

“Sentí que este proyecto de ley cuestionaba una creencia religiosa que yo sentía profundamente, que debíamos ser una sociedad abierta para personas menos afortunadas de todo el mundo”, dijo y se enorgullecía de citar las declaraciones del obispo de Kansas Dean Wolfe en apoyo del continuo reasentamiento de refugiados.

Wolfe, que dejó la Diócesis de Kansas este año para convertirse en rector de la iglesia de San Bartolomé [St. Bartholomew’s Church] en Nueva York, llegó a conocer a Clark y Whipple durante su estada en Kansas.

“Una de las alegrías del ministerio ordenado es ver a tus feligreses llevar su fe al mundo. Lonnie Clark y Brandon Whipple dan sacrificialmente de su tiempo y talento para servir al público como miembros de la legislatura de Kansas”, dijo Wolfe en un declaración por correo electrónico a ENS. “Me siento muy feliz de que tengamos personas fieles como Lonnie y Brandon empeñados en tomar decisiones para el bien común en un ambiente político cada vez mas polarizado”.

Los dos legisladores dicen que llegar a conocerse como episcopales les ha ayudado a verse mutuamente como servidores públicos motivados a hacer de Kansas un mejor lugar a pesar de militar en partidos distintos.

“Creo que él intenta hacer lo mismo que yo”, dijo Clark. “Sólo que tomamos una senda diferente al hacerlo”.

David Paulsen es redactor y reportero de Episcopal News Service. Pueden dirigirse a él a dpaulsen@episcopalchurch.org. Traducción de Vicente Echerri.


Tags