Cambios en las protestas de Roca Enhiesta expanden el ministerio de la Iglesia Episcopal

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Oct 24, 2016
Individuos obviamente desarmados que se oponen al oleoducto marchan del otro lado de una cerca donde se alinean un destacamento de policías armados cerca del sitio de la construcción. Foto de Rob Wilson vía Facebook

Individuos obviamente desarmados que se oponen al oleoducto marchan del otro lado de una cerca donde se alinean un destacamento de policías armados cerca del sitio de la construcción. Foto de Rob Wilson vía Facebook

[Episcopal News Service] El próximo invierno y las cambiantes actitudes de parte de algunos de los que se oponen al proyecto del Oleoducto para el Acceso a las Dakotas (DAPL por su sigla en inglés), así como de los agentes de la fuerza pública cerca de la reserva de la nación sioux de Roca Enhiesta, están cambiando el ministerio de la Iglesia Episcopal en esa parte de Dakota del Norte.

Los episcopales dedicaron parte del 24 de octubre a ir en furgonetas de la Iglesia a varios lugares del estado a recoger a manifestantes que habían sido arrestados durante el fin de semana. Una mudanza proyectada pondrá un campamento de protesta de invierno cerca de una iglesia episcopal, la cual podrá prestarles más servicios a los acampados.

Dakota Access Pipeline project opponents and law enforcement officers face off with a fence between them near a pipeline construction site. Photo: Morton County Sheriff Department via Facebook

Opositores al proyecto del Oleoducto para el Acceso a las Dakotas y agentes de orden público se enfrentan con una cerca de por medio en las inmediaciones de un sitio donde se construye el oleoducto. Foto del Departamento el Alguacil del Condado de Morton vía Facebook.

El fin de semana del 22 y 23 de octubre fue candente cerca de la propuesta línea del oleoducto. El Departamento del Alguacil del Condado de Morton dijo el 24 de octubre que 126 personas habían sido arrestadas dos días antes por “actividades de protesta ilícitas” durante un día en que a menudo hubo violentos encuentros con los que protestaban por el oleoducto que pasará por debajo del suministro de agua de los sioux de Roca Enhiesta [Standing Rock], por encima de la tierras que les pertenecen por tratado y a través de algunos de sus sitios de enterramiento. Una persona fue arrestada el 23 de octubre, dijo el departamento, lo cual hacía ascender a 269 el número de arrestados desde que comenzara la protesta el 10 de agosto.

Algunos de los que se oponen al oleoducto, que prefieren llamarse a sí mismos “protectores”, parecían “haber subido la apuesta y se habían situado en algunos lugares para bloquear la construcción”, dijo a Episcopal News Servicie, el 24 de octubre, el Rdo. John Floberg, sacerdote supervisor de las iglesias episcopales en el lado de Dakota del Norte de Roca Enhiesta. Las autoridades, añadió, respondieron con lo que él llamó una “fuerza abrumadora”.

“Desde mi lado de esto, las autoridades siempre han sido provocadoras y excesivas, y las personas que están llevando a cabo sus actos de protección están siendo empujadas a asumir una postura más firme que sigue siendo no violenta”, dijo Floberg en una entrevista telefónica mientras se dirigía, en una furgoneta de la iglesia, a Fargo, Dakota del Norte, a unas cuatro horas al este de los campamentos, para recoger a algunos de los manifestantes a quienes habían llevado hasta allí para instruirlos de cargos.

“This flag has flown so proudly,” in part because it was the only Christian church flag at the Dakota Access Pipeline camp in North Dakota, the Rev. John Floberg told Episcopal Church Canonical Archivist Mark Duffy, right, as he presented the flag to his care. “And we hate to give her up,” Floberg added, his voice faltering.  Photo: Mary Frances Schjonberg/Episcopal News Service

“Esta bandera ha ondeado tan orgullosamente” en parte porque fue la única bandera de una iglesia cristiana en el campamento del Oleoducto para el Acceso a las Dakotas, en Dakota del Norte, dijo el Rdo. John Floberg a Mark Duffy, archivero canónico de la Iglesia Episcopal, a la derecha, al entregarle la bandera a su cuidado. “Y lamentamos entregarla”, agregó Floberg con la voz quebrada. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

El viaje de Floberg a Fargo el 24 de octubre fue uno de los dos viajes que la iglesia episcopal en Roca Enhiesta estaba haciendo ese día para llevar a algunos manifestantes de regreso a los campamentos. A las personas arrestadas las llevaron a seis sitios del vasto estado de Dakota del Norte para ser procesadas, explicó Floberg “Y desde luego no les ofrecieron llevarlos de regreso a sus casas”, añadió.

El tribunal de Bismarck informó que el departamento del alguacil dijo que cuatro manifestantes le habían sacado el aire a las llantas de un vehículo que se dirigía al sitio de la construcción y que luego se habían amarrado al vehículo. Dos de ellos se ataron a la parte externa del vehículo y uno al volante. Una cuarta persona había metido el brazo a través de un agujero de la portezuela con la mano en un cubo de cemento fraguado. A los cuatro los zafaron del vehículo y luego los arrestaron.

El periódico dijo que entre 200 y 300 manifestantes marcharon en las primeras horas de la mañana hasta un sitio de construcción del oleoducto y comenzaron a levantar un nuevo campamento. El terreno es privado y lo vendieron recientemente a la compañía constructora, pero algunos también la reclaman como tierra perteneciente a la nación sioux.

“Esto se esta definiendo como un disturbio porque los individuos saben que están incurriendo en una violación delictiva”, dijo el capitán Bryan Niewind, de la Patrulla de Caminos de Dakota del Norte, según el Bismarck Tribune. “Están creándole un caos a las fuerzas del orden. Están creando un ambiente peligroso para nosotros cuando uno tiene a personas que se amarran a un equipo”.

Niewind también describió a los manifestantes como verbalmente agresivos.

Law-enforcement officers, some dressed in riot gear and one with a rifle, wait Oct. 22 as others cut through a ranch fence to get nearer to protestors. Photo: Rob Wilson Photography via Facebook

Agentes del orden público, algunos de ellos con trajes antimotines y uno de ellos con un fusil, se muestran a la espera mientras otros cortan la cerca de un rancho para acercarse a los manifestantes. Foto de Rob Wilson vía Facebook.

Las fotografías de las acciones del 22 de octubre que aparecieron en el Tribune y en varias páginas de Facebook muestran a agentes de la policía de distintos uniformes con trajes antimotines y blandiendo largos garrotes, fusiles y propulsores de gas pimienta del tamaño de extinguidores de incendios. Puede verse al menos un vehículo que parece un carro blindado. Se uso el gas pimienta porque “queremos usar el menos agresivo de los métodos no letales de que disponemos”, dijo Rob Keller, portavoz del Departamento del Alguacil del Condado de Morton, al periódico.

El 23 de octubre, el departamento del alguacil dijo que los manifestantes habían “atacado un helicóptero con un avioncito no tripulado (un drone), que le habían disparado flechas a un helicóptero, abierto un camino ilegal para bloquear la Autopista 1806 y ocupado ilegalmente una propiedad privada mudándose en tiendas y tipis en un sitio de construcción del DAPL”.

Floberg dijo que los agentes del orden le dispararon al drone. “Esos son disparos al aire y uno no sabe donde van a ir a dar esas balas”, dijo él. “Esa acción también es provocadora”.

Opositores al proyecto del oleoducto, en un esfuerzo por llegar hasta los manifestantes que bloquearon un vehículo en un sitio de construcción, marchan por un camino abierto por la compañía constructora a través de suelo sagrado. Foto de Rob Wilson vía Facebook.

Opositores al proyecto del oleoducto, en un esfuerzo por llegar hasta los manifestantes que bloquearon un vehículo en un sitio de construcción, marchan por un camino abierto por la compañía constructora a través de suelo sagrado. Foto de Rob Wilson vía Facebook.

Kyle Kirchmeier, alguacil del Condado de Morton, dijo en una conferencia de prensa el 24 de octubre que la presencia de la fuerza pública se incrementará cerca de los campamentos de los manifestantes y cerca de la ruta del oleoducto. Él dijo que personal proveniente de Indiana, Minnesota, Nebraska, Dakota del Sur, Wisconsin y Wyoming respondieron a su petición de ayuda. Agentes de otros condados de Dakota del Norte y de la patrulla de caminos del estado ya están ayudando al Condado de Morton.

Las autoridades han cerrado secciones de la Autopista 1806, la principal carretera que corre de norte a sur a través de la reserva. Niewind dijo en la conferencia de prensa que la carretera no era segura debido a la actividad de la protesta.

El 22 de octubre, Floberg y sus colegas del Consejo Ejecutivo de la Iglesia Episcopal le pidieron a los funcionarios federales y del estado  que “disminuyeran la provocación militar y policial en los campamentos, y en sus cercanías, de los que protestan pacíficamente [contra] el proyecto del Oleoducto para el Acceso a las Dakotas”

La resolución del Consejo se arraiga en el apoyo de la Iglesia Episcopal a la nación sioux de Roca Enhiesta en su lucha contra el oleoducto. Ese apoyo proviene del obispo primado Michael Curry tanto de palabra como en su presencia con los manifestantes, así como de las visitas de Heidi J. Kim, funcionaria del personal de la Iglesia Episcopal para la reconciliación racial; del Rdo. Charles A. Wynder Jr.., funcionario encargado de la justicia y promoción sociales; de la Rda. Heather Melton, funcionaria encargada de la Ofrenda Unida de Gracias (UTO) y de la Junta Directiva de la UTO.

Después del violento fin de semana, Floberg comenzó a reclutar al menos a100 personas ordenadas para una “acción unida del clero”, que está programada ahora para el 4 de noviembre al objeto de mostrarle tanto a la tribu como a los agentes de la fuerza pública que el clero está a favor de Roca Enhiesta.

“La razón es también para que aquellos comprometidos en la protesta vean que el clero está dando testimonio de una protesta pacífica no violenta”, dijo él.

Los participantes del clero serán adiestrados antes de la protesta a “de qué manera llegar hasta la línea y no cruzarla”.

“Lo que yo tengo muy claro es que en cada declaración que se haga, no importa que denominación la haya hecho, somos solidarios con el presidente y el consejo tribal de Roca Enhiesta”, resaltó él. “Vamos a seguir su dirección en todo lo que hagamos. No es una declaración de solidaridad con los campamentos. Nunca declaramos eso”.

Floberg reconoció que los campamentos han sido criticados por su falta de liderazgo unificado. “Y la gente ha ido más allá de los límites de lo que la tribu sioux de Roca Enhiesta ha dicho que quería hacer y no ha hecho, de manera que estamos intentando reforzar la posición del presidente”, dijo él, refiriéndose a la acción del clero, que la posición de la tribu pide que se proteste contra el oleoducto al tiempo que reconoce que el oleoducto se detendrá a través de procesos en los tribunales y en otras instancias del gobierno.

La naturaleza de los campamentos está a punto de cambiar. Floberg le dijo a ENS durante la reunión del Consejo Ejecutivo que el Consejo tribal de los sioux aprobó el 19 de octubre invitar a los acampados en el campamento Oceti Sakowin a venir a lo que ahora se llama Campamento de Invierno, en terrenos de la reserva, a unos tres kilómetros al sur del sitio actual y cerca de la iglesia episcopal de Santiago Apóstol [St. James’] en Cannon Ball, Dakota del Norte. Cuando la tribu le pidió a la comunidad de Cannon Ball que considerara ocupar el campamento, la iglesia auspició la reunión —y suministró la cena— para que los residentes discutieran el asunto.

El campamento de Oceti Skowin se extiende a lo largo de la ribera norte del río Cannonball, en la reserva sioux de Roca Enhiesta. Así se ve desde una altura que le llaman Facebook Hill, donde se reúnen los medios de prensa y donde la gente puede cargar sus aparatos electrónicos en un camión con paneles de energía solar y donde uno puede en ocasiones conseguir una señal para el teléfono celular. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

El campamento de Oceti Skowin se extiende a lo largo de la ribera norte del río Cannonball, en la reserva sioux de Roca Enhiesta. Así se ve desde una altura que le llaman Facebook Hill, donde se reúnen los medios de prensa y donde la gente puede cargar sus aparatos electrónicos en un camión con paneles de energía solar y donde uno puede en ocasiones conseguir una señal para el teléfono celular. Foto de Mary Frances Schjonberg/ENS.

Uno de los beneficios de la mudanza, dijo Floberg, es que la policía tribal tendrá jurisdicción sobre el área. Se han propuesto alojamientos de adobe y él ofrecerá la miniexcavadora de la iglesia, que se compró a través de una subvención de sostenibilidad del presupuesto de la Iglesia Episcopal, para usarla en la construcción del campamento.

El sitio propuesto de 20 hectáreas está cerca de una torre de comunicaciones celulares. Floberg, que ha estado practicando un ministerio de presencia con los manifestantes durante meses, dijo que se espera que el campamento sea capaz de alojar a 500 personas, la mayoría de ellas no residentes de la reserva. Debido a que ese número es mucho menor que los miles que han estado en los otros campamentos, explicó Floberg, a los acampados se les pedirá que roten, de manera que tantas personas como sea posible “puedan venir y unirse en solidaridad”.

“Convertiremos nuestro espacio de fines múltiples que es la iglesia en un lugar donde la gente pueda encontrar esparcimiento, donde puedan tener películas”, dijo él refiriéndose a Santiago Apóstol. “Seguiremos respondiendo a las necesidades humanas según se nos presenten y en tanto otras causas no puedan ayudar”.

Y, afirmó Floberg, Santiago Apóstol no dudará en tener una fiesta de Navidad, “como nunca la hemos hecho antes”.

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri.


Tags