Educación teológica desde la realidad Latinoamericana

By Clara Villatoro
Posted Oct 18, 2016

[Episcopal News Service] La Comisión de Educación Teológica para América Latina y el Caribe (CETALC) tiene claro que quiere desarrollar un trabajo pastoral que responda a las necesidades de cada región. Para lograrlo  —según dicen los miembros de la comisión— el primer desafío está en la preparación de clérigos y laicos.

“Los seminarios no pueden enfocarse en un solo aspecto, se debe integrar la teología con la realidad actual, con todo lo que toca a nuestra sociedad. La pastoral se debe mover en diversos campos y procurar, por medio del mensaje del evangelio, formar, cambiar y transformar la sociedad. Pero para ello se necesita una buena formación”, afirmó el obispo Julio Holguín, presidente de la CETALC.

Como primer paso para encaminar la formación, tras un encuentro a finales de agosto, los miembros de la CETALC han acordado homologar los planes de estudio en toda América Latina.

“Consideramos que al ser una misma iglesia, el caminar de la educación teológica no puede  realizarse de manera fragmentada. Generar un proceso de acción y reflexión visualizando los desafíos a los cuales nos enfrentamos en este siglo puede ayudarnos a generar una perspectiva más amplia y [a dar] una respuesta como bloque”, explicó el Rdo. Eduardo Chinchilla, representante de Costa Rica en la CETALC.

El obispo Holguín manifestó que otro de los desafíos que han analizado como CETALC es la identidad, el ser episcopal en un contexto latinoamericano es un reto. Según el obispo Holguín, en muchas regiones se puede ver la influencia de otras denominaciones religiosas dentro de las iglesias anglicanas. En otras comunidades, sin embargo, se puede ver a los clérigos luchando por mantener la identidad episcopal pero olvidando el contexto en el que se desarrollan.

Respecto a este desafío, según el Rdo. Chinchilla, uno de los grandes acuerdos en el último encuentro de la CETALC fue la futura publicación de un libro sobre la historia del anglicanismo en toda América Latina y el Caribe “para que se use como libro de texto en toda la iglesia.”

Mayor presencia de las mujeres

La Iglesia Episcopal ha revolucionado mucho con su apertura a grupos históricamente marginados como las mujeres y la comunidad LGBT. Sin embargo, la presencia de mujeres en la formación teológica es reciente en Latinoamérica.

“Para mi uno de los puntos importantes del último encuentro es que había mujeres encargadas de la educación teológica representando a algunos países. En el pasado, en esa reunión uno veía sólo hombres, pero en esta ocasión hubo más presencia de mujeres”, dijo a ENS la Rda. Glenda McQueen, funcionaria de la Iglesia Episcopal para América Latina y el Caribe.

Cuba, México, El Salvador y Brasil tienen a mujeres sacerdotes como directoras de educación teológica. “En mi equipo de trabajo soy la única mujer, pero nunca he sentido que me traten diferente. Apoyan mi trabajo y aprecian mis cualidades”, expresó la Rda. Irma Guerra de Alvarado, directora de educación teológica de El Salvador.

De hecho, su trabajo en El Salvador en este momento es muy importante, dado que la iglesia episcopal tiene previsto abrir su primer seminario en 2017 y la formación de las futuras generaciones está en sus manos. La Rda. Guerra fue la primera sacerdote salvadoreña formada y ordenada en San Salvador. “No somos muchas, pero esperamos que con oportunidades de formación en el país, el número de mujeres religiosas y laicas aumente”, dijo la Rda. Guerra.

El obispo Holguín reconoció que en medio de la cultura latinoamericana —donde el machismo está muy arraigado—  el camino para las mujeres episcopales no ha sido fácil, pero se ha avanzado.

“Hay mucho por luchar aún, en especial en algunas zonas de Suramérica, porque no se ha logrado que las mujeres logren la plenitud de [la] ordenación; pero hemos avanzado y no hay retroceso. Se tiene claro que el ministerio y el trabajo pastoral es una tarea para hombres y mujeres. Todos estamos llamados por igual”, afirmó el obispo.

Realidad social y formación

Latinoamérica y el Caribe enfrentan hoy más que nunca problemas sociales como la pobreza, la migración, la violencia, el desempleo, la crisis política, etc. La CETALC considera que los religiosos y laicos deben estar preparados para responder a estos problemas desde la fe y el trabajo pastoral. Para ello se espera reformar y homologar todos los planes de estudio de la región, mientras tanto la Comisión continúa con sus esfuerzos por extender las oportunidades de educación mediante becas.

La Rda. McQueen explicó que se continuará otorgando becas contempladas en seis categorías. Estás van desde becas individuales para visitar Tierra Santa, becas de investigación, subvenciones a diócesis e incluso algunos apoyos financieros para educación por provincia.

Según el Rdo. Chinchilla, las provincias también han decidido compartir recursos para la formación. De hecho, se planteó la posibilidad de intercambios de docentes y de estudiantes, al igual que de recursos bibliográficos.  Brasil ya puso a disposición de todos los seminarios participantes su banco de recursos en español y portugués desde su página web.

El obispo Holguín espera que estos esfuerzos contribuyan a un mejor trabajo pastoral en Latinoamérica y el Caribe. Sin embargo, reconoce que ante la realidad de los países de la zona, muchas veces los clérigos ya formados emigran a Estados Unidos u otros países.

“Nos alegra que nuestros clérigos tengan buena acogida en EE.UU. Vemos con satisfacción que muchos sirvan a la comunidad latina allá. Aunque lo ideal sería que también encontraran buenas oportunidades en sus propios países”, manifestó el obispo.

La CETALC funciona desde los años 70, por lo que cientos de clérigos se han formado con su apoyo. La Comisión prepara en este momento un estudio centrado en el impacto que ha tenido la educación teológica en Latinoamérica. Se espera que el informe final se presente a finales de este año.