El Obispo Primado comparte su visión para la misión

La 21ª. conferencia anual de la Red Global de la Misión Episcopal

Por Lynette Wilson
Posted May 20, 2016
El obispo primado Michael Curry responde preguntas durante una sesión vespertina de preguntas y respuestas el primer día de la 21ª. Conferencia anual de la Red Global de la Misión Episcopal que está teniendo lugar en Ponce, Puerto Rico. Foto de Lynette Wilson/ENS.

El obispo primado Michael Curry responde preguntas durante una sesión vespertina de preguntas y respuestas el primer día de la 21ª. Conferencia anual de la Red Global de la Misión Episcopal que está teniendo lugar en Ponce, Puerto Rico. Foto de Lynette Wilson/ENS.

[Episcopal News Service – Ponce, Puerto Rico] El obispo primado Michael Curry trajo su mensaje del Movimiento de Jesús a la 21ª. conferencia de la Red Global de la Misión Episcopal (GEMN, por su sigla en inglés) durante su alocución del 18 de mayo.

“La evangelización no es más que un mendigo diciéndole a otro mendigo donde encontrar  [un poco de] pan”, dijo él, citando al pastor metodista cingalés, D.T. Niles. “Y así yo soy sólo un mendigo que le habla a otros mendigos de nuestra labor de ayudar a otros mendigos de encontrar algún genuino pan”.

En su mayor reunión hasta ahora, más de 120 episcopales —entre ellos 20 jóvenes adultos y misioneros adultos— han acudido a la Universidad Interamericana de Puerto Rico en Ponce para una conferencia [que se extiende] del 18 al 20 de mayo. Además de la interconexión, la conferencia anual brinda una oportunidad a los participantes de asistir a talleres orientados a educarles y capacitarles en su obra de misión y a adorar juntos.

“Yo sí le doy gracias a Dios por ustedes, tanto por la GEMN como por aquellos que sirven de misioneros en nombre de la Iglesia Episcopal en el contexto de nuestra comunidad global”, dijo Curry, al comienzo de su alocución. “La GEMN, la mayor red de misión independiente de la Iglesia Episcopal, consta de diócesis, iglesias, organizaciones e individuos comprometidos con la participación en la misión global y en relacionar a las personas a través de la misión. Además de conferencias de misión, la GEMN ofrece adiestramiento y educación y materiales para la misión.

La referencia de Curry a lo que la Iglesia hace y cómo lo hace en el contexto de la misión aborda uno de los mayores desafíos que enfrenta la red de la misión con “promover las asociaciones, el compañerismo y las relaciones recíprocas, e intentar deshacer el modelo postcolonial [de acercamiento a la misión]”, dijo Karen Hotte, directora ejecutiva de la GEMN.

“¿Qué aspecto tiene la misión hoy día dadas las lecciones aprendidas del pasado?, añadió ella.

El Obispo Primado, en una sesión vespertina de preguntas y respuestas, habló acerca de cómo ha cambiado el enfoque de la Iglesia sobre la misión, y cómo el enfoque actual se parece a uno más antiguo.

“Este momento de la misión tiene menos en común con la Iglesia de los años 50 [del pasado siglo], o la Iglesia de la alta Edad Media o la Iglesia de la era que siguió a la Reforma, menos en común con esas eras y más en común con el movimiento cristiano primitivo de los Hechos de los Apóstoles”, afirmó.

Desde su consagración en noviembre de 2015, el Obispo Primado ha hablado constantemente acerca del Movimiento de Jesús y sus dos componentes —evangelización y reconciliación— y lo que significa para los episcopales y para la Iglesia Episcopal ser parte de ese movimiento.

“La vía anglicana de ser cristiano tiene su origen en el camino de Jesús, en el movimiento de Jesús, eso es quienes somos, como anglicanos, como episcopales, como cristianos”, dijo Curry en su alocución. “Somos el Movimiento de Jesús y cuando afirmemos eso —oh, Iglesia, permanece a mi lado—, cuando afirmemos eso nos hallaremos en medio de una gran revolución”.

Pero ser parte del movimiento significa también que los episcopales deben conocer a Jesús de Nazaret.

Hay una diferencia entre Jesús de Nazaret, el hombre que describen en el Nuevo Testamento, más específicamente en los Evangelios, y el Jesús de la moderna cultura cristiana,  recalcó él.

“Cuando la vida se reorienta en torno a Jesús de Nazaret, lo que el hermano realmente enseñó, no sólo lo que la cultura dice que él enseñó…”, dijo Curry. “Este Jesús es alguien que cambia las reglas del juego y que puede mostrarnos el camino que nos aleja de la pesadilla y nos acerca al sueño de Dios para todos nosotros”.

“Este Movimiento de Jesús tiene que ver con el surgimiento de algunas personas de Jesús, personas que miran y suenan y hablan como Jesús”, añadió.

Los misioneros James Guandique y Rachel Schnabel del Cuerpo de Servicios de Jóvenes Adultos, participan en una discusión de un pequeño grupo durante la sesión matutina de la conferencia. Foto de Lynette Wilson/ENS.

Los misioneros James Guandique y Rachel Schnabel del Cuerpo de Servicios de Jóvenes Adultos, participan en una discusión de un pequeño grupo durante la sesión matutina de la conferencia. Foto de Lynette Wilson/ENS.

Luego de la alocución del Obispo Primado, los participantes se reunieron en pequeños grupos para reflexionar sobre su mensaje y para formular preguntas  sobre el papel de los episcopales y la Iglesia de ser portadores de la misión de Dios en el mundo.

En una sesión vespertina de preguntas y respuestas que siguió, el Rdo. Titus Presler, que ha prestado servicios durante mucho tiempo en Edwardes College en Peshawar, Pakistán, le hizo al Obispo Primado algunas de las preguntas de los pequeños grupos.

La primera pregunta se centró en cómo hablar acerca de Jesús sin “desinteresar a la gente” y si bastaba hablar acerca del modo cristiano de vida más bien que, específicamente, acerca de Jesús.

Respuesta de Curry: Sí, Jesús tiene que ser parte de la conversación.

La pregunta lo hizo retomar el tema de la diferencia entre Jesús de Nazaret y el Jesús cultural.

“El Jesús de los Evangelios, no importa cómo uno lo presente, define el amor como el tuétano, el centro, es el ser todo y el fin de todo, es el comienzo y el fin, el modo de amar de Dios y el amor del prójimo, es la suma total de la íntegra empresa espiritual y religiosa”, dijo, añadiendo que esa no es la manera en que se presenta el Cristo cultural.

El mensaje de Jesús, afirmó, se encuentra en las parábolas del hijo pródigo y de las ovejas y las cabras, así como en el Sermón del Monte.

“Ese Jesús nos llama invariablemente a [alcanzar] una mayor elevación y es un constante desafío  a nuestra manera de ser… ese Jesús con mucha frecuencia no es simplemente una ‘Buena Noticia’,  sino una ‘noticia nueva’ porque no estoy seguro de que Jesús sea en verdad conocido, y porque a ese Jesús no se le conoce realmente, [porque] no es comprendido ni conocido, el que nosotros no lo mencionemos significaría que él estaría totalmente ausente de la conversación.

“Creo en verdad que este Jesús de Nazaret es imperativo, no para nuestros fines de manipular a nadie, sino por nuestra autenticidad de ser quienes somos”.

— Lynette Wilson es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri.


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