Afloran las cosas en común mientras los participantes de Gálatas 6:2 comparten sus historias

Por Lynette Wilson
Posted Apr 4, 2016
El Rdo. C. K. Robertson, canónigo del obispo primado Michael Curry para el ministerio más allá de la Iglesia Episcopal, y Rebecca Linder Blachly, asesora principal para África del Departamento de Estado de EE.UU. en la Oficina de Religión y Asuntos Globales, juegan con unos huérfanos en el Orfanato Valentine el 2 de abril, durante una visita del grupo a ministerios de asistencia comunitaria de la Diócesis de Da es-Salam, Tanzania. Foto de Andrea Mann.

El Rdo. C. K. Robertson, canónigo del obispo primado Michael Curry para el ministerio más allá de la Iglesia Episcopal, y Rebecca Linder Blachly, asesora principal para África del Departamento de Estado de EE.UU. en la Oficina de Religión y Asuntos Globales, juegan con unos huérfanos en el Orfanato Valentine el 2 de abril, durante una visita del grupo a ministerios de asistencia comunitaria de la Diócesis de Da es-Salam, Tanzania. Foto de Andrea Mann.

[Episcopal News Service – Dar es-Salam, Tanzania] Durante la Conferencia Gálatas 6:2, los participantes de seis provincias de la Comunión Anglicana encontraron que en los temas de identidad anglicana y episcopal, educación teológica, migración, trata de personas y medioambiente, sus afinidades superan notablemente sus diferencias.

El reunirse para debatir los retos que afectan a la Iglesia y el mundo y buscar soluciones le recordaba a la Rda. Vicentia Kgabe, rectora del Colegio Universitario de la Transfiguración, en Grahamstown, Sudáfrica, de la importancia de la comunidad y de la riqueza de la Comunión Anglicana.

“Los vínculos del afecto siguen siendo más fuertes”, dijo Kgabe. Pero la Iglesia, añadió, necesita fortalecer su voz en el mundo.

Veintitrés personas que representan a seis provincias de la Comunión Anglicana —Burundi, África Central, África del Sur, Tanzania, África Occidental y la Iglesia Episcopal de Estados Unidos— se reunieron del 30 de marzo al 3 de abril en una conferencia destinada a desarrollar un modelo de colaboración que capacitará a las provincias a compartir mutuamente las cargas de la misión. Durante la conferencia, el grupo llevó en oración a la vecina Burundi, que experimenta actualmente conflicto y violencia políticos.

El versículo bíblico de referencia, “Ayúdense unos a otros a llevar sus cargas y así cumplirán la ley de Cristo”, apoyó la labor y la fraternidad de los participantes.

Uno de los resultados más esperanzadores de la conferencia “es la comprensión y el reconocimiento de que somos parte los unos de los otros como hermanos y hermanas en Cristo”, dijo el obispo Brian Marajh, de la Diócesis de George en la Iglesia Anglicana de África del Sur, quien añadió que es importante poner esto en el contexto de “donde nos encontramos en la Comunión Anglicana… el imperativo del Evangelio de ser parte, en vez de estar aparte”.

Patricia Kisare, funcionaria de asuntos internacionales de la Iglesia Episcopal, con sede en Washington, D.C. y el obispo Jacob Ayeebo, de Tamale, Iglesia Anglicana de Ghana, hablan con una de las hermanas de la Comunidad de Santa María, una orden de la Iglesia Anglicana de Tanzania. Foto de Andrea Mann.

Patricia Kisare, funcionaria de asuntos internacionales de la Iglesia Episcopal, con sede en Washington, D.C. y el obispo Jacob Ayeebo, de Tamale, Iglesia Anglicana de Ghana, hablan con una de las hermanas de la Comunidad de Santa María, una orden de la Iglesia Anglicana de Tanzania. Foto de Andrea Mann.

Los problemas de la sexualidad humana y de los matrimonios de parejas del mismo sexo han tensado las relaciones en la Comunión Anglicana desde principios de este siglo.

En enero, una mayoría de los primados anglicanos exigió “consecuencias” para la Iglesia Episcopal y recomendó que se restringiera su participación en los diálogos ecuménicos y en algunos organismos de la Comunión Anglicana. Las decisiones de los primados en su reunión en Cantórbery, Inglaterra, se produjeron como respuesta a las decisiones de la Convención General en 2015 de cambiar el lenguaje canónico que define el matrimonio y la autorización de ritos matrimoniales que se aplicarían tanto a parejas del mismo sexo como de sexos opuestos.

La Conferencia Gálatas 6:2 se había planeado antes de la reunión de los primados, en parte como respuesta a esas viejas diferencias, pero también como enfoque cambiante a las relaciones misionales y las asociaciones entre las iglesias de Estados Unidos y África. La conferencia se concibió durante una reunión en octubre de 2014 en Nueva York donde los seis primados que asistieron manifestaron su intención de crear asociaciones misionales entre sus iglesias.

“Uno de los grandes logros de esta conferencia ha sido el fortalecimiento de nuestras relaciones como miembros unidos de nuestra familia anglicana global”, dijo el Rdo. Chuck K. Robertson, canónigo del obispo primado Michael Curry para el ministerio más allá de la Iglesia Episcopal. Robertson participó en la Conferencia Gálatas 6:2 como parte de la delegación de la Iglesia Episcopal. “Al compartir nuestras historias, en nuestras deliberaciones y decisiones, y en nuestra oración común, hemos profundizado la amistad y la confianza entre nosotros incluso al tiempo de comprometernos de nuevo con el trabajo decisivo que todos tenemos por delante”, añadió.

“Estas personas están interesadas en trabajar en asociación, no en aislamiento”, dijo el Rdo. Canónigo Isaac Kawuki-Mukasa, que trabaja como encargado de las relaciones para África tanto de la Iglesia Anglicana del Canadá como de la Iglesia Episcopal.

Kawuki-Mukasa ayudó a coordinar la conferencia junto con el Rdo. Ranjit K. Mathews, encargado de las asociaciones de África de la Iglesia Episcopal y Patricia Kisare, funcionaria de asuntos internacionales de la Iglesia Episcopal, con sede en Washington, D.C. Entre los observadores se contaban Rebecca Linder Blachly, asesora principal para África del Departamento de Estado de EE.UU. en la Oficina de Religión y Asuntos Globales; Grace Kaiso, secretaria general del Consejo de Provincias Anglicanas de África y Andrea Mann, directora de relaciones globales de la Iglesia Anglicana del Canadá.

“Siempre que haya una oportunidad para la Comunión de reunirse para trabajar sobre importantes asuntos de interés mutuo es algo bueno”, dijo Mann, añadiendo que esta conferencia fue de particular importancia porque los participantes  buscaban desarrollar un modelo de colaboración que se proponía conducir a asociaciones provinciales. “Es la implementación concreta de una comisión de los primados a las provincias para que empecemos a hacer algo”.

Los participantes y los organizadores están redactando una carta a los seis primados para compartir los resultados del grupo y sus recomendaciones de futura colaboración. Entre los participantes había obispos, sacerdotes, decanos y funcionarios de desarrollo, quienes, a través de la conferencia, trabajaron en pequeños grupos y compartieron sus historias y experiencias mientras debatían los nueve temas de la conferencia establecidos de antemano. Los nueve temas eran: sostenibilidad, salud/medio ambiente, trata de personas/migración, educación teológica/libertad religiosa y finanzas/pensiones.

Al inicio de la conferencia los participantes hicieron un pacto entre sí de participar plenamente, de escuchar y de compartir sus historias. Fue en medio de un espíritu generoso y de narración de historias que empezaron a formarse las causas comunes y las conexiones.

“Se han creado relaciones, ahora estamos en la senda los unos de los otros”, dijo el obispo David Rice, de la Diócesis de San Joaquín en California Central. “Esto nos permitirá hacer algo, recorrer esa senda juntos, llevarnos mutuamente las cargas”.

Pese a las diferencias existentes en la Comunión Anglicana, como ha mostrado la Conferencia Gálatas 6:2, la Comunión tiene muchas más cosas en común que aquellas en las que discrepa, dijo Mathews.

“Vamos a seguir comunicándonos en asociación basados en la misión común. Continuamos creyendo que lo que nos une es mucho más fuerte que lo que nos divide”, afirmó. “Es hora de que nos concentremos en lo que nos mantiene unidos. Esto es un ejemplo concreto de avance, y es por eso que es importante. Por muchísimo tiempo hemos permitido que otros definan lo que entendemos por asociación”.

La Conferencia de Gálatas 6:2 fue sólo un ejemplo de las formas en que la Iglesia Episcopal y su Obispo Primado, Michael Curry, mantienen el diálogo con las provincias anglicanas en África. Por ejemplo, Curry viajará a Accra, Ghana, en mayo, para una reunión de la Consulta de Obispos Anglicanos en Diálogo, la cual comenzó en la Conferencia de Lambeth 2008 en respuesta a diferencias sobre uniones del mismo sexo y cuestiones más extensas de interpretación bíblica.

La Conferencia Gálatas 6:2 tuvo lugar poco más de una semana antes del Consejo Consultivo Anglicano, que reúne hasta tres representantes de cada provincia cada tres o cuatro años y que está programado para sesionar del 8 al 19 de abril en Zambia.

– Lynette Wilson es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri.


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