En Los Ángeles, los episcopales se asocian con otros para ayudar a los refugiados

‘Acoger al extranjero’ más esencial que nunca

Por Pat McCaughan
Posted Nov 20, 2015
Un niño refugiado sirio poco después de llegar, el 20 de noviembre —en una balsa atestada de inmigrantes y refugiados—, a una playa de la isla griega de Lesbos. Los países balcánicos han comenzado a filtrar el flujo de migrantes a Europa, concediéndoles paso a los que huyen del conflicto en el Oriente Medio y Afganistán, pero rechazando a otros provenientes de África y Asia, dijeron el jueves testigos de las Naciones Unidas y Reuters. Foto de Yannis Behrakis/Reuters.

Un niño refugiado sirio poco después de llegar, el 20 de noviembre —en una balsa atestada de inmigrantes y refugiados—, a una playa de la isla griega de Lesbos. Los países balcánicos han comenzado a filtrar el flujo de migrantes a Europa, concediéndoles paso a los que huyen del conflicto en el Oriente Medio y Afganistán, pero rechazando a otros provenientes de África y Asia, dijeron el jueves testigos de las Naciones Unidas y Reuters. Foto de Yannis Behrakis/Reuters.

[Episcopal News Service] Luego de tres años en un campamento de refugiados en Jordania, una familia siria de cuatro personas —a punto de convertirse en cinco—llegó el 12 de noviembre al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles con las pocas posesiones que habían atiborrado en maletas y bolsas.

Esperándoles estaban un grupo de bienvenida de la iglesia de Todos los Santos [All Saints Church] en Pasadena y Raffi Manser, asistente social del Servicio Interreligioso de Refugiados e Inmigración (IRIS, por su sigla en inglés).

La iglesia está asociada con IRIS, un programa de la Diócesis Episcopal de Los Ángeles y una de las aproximadas 30 agencias afiliadas del servicio de reasentamiento de la Sociedad Misionera Nacional y Extranjera, el Ministerio Episcopal de Migración, que ha estado reasentando refugiados en toda la nación durante más de 75 años.

Sin familiares ni amigos en Estados Unidos, sin historial de crédito ni empleo establecido, conseguir y amueblar viviendas para los recién llegados constituye un gigantesco desafío, dijo Manser.

Es ahí donde Todos Los Santos intervino para ayudar, abasteciendo el apartamento, situado a unos 24 kilómetros al este de Pasadena, dijo Juliana Serrano, asociada principal para paz y justicia. “A través de nuestro grupo de bienvenida, garantizamos donaciones para hacer posible su reubicación. Llegaron a un apartamento totalmente amueblado con despensa y nevera llena de víveres”.

Ella dijo que “la trayectoria de la congregación en esto comenzó antes del viernes y de los ataques en París. Donde esto comenzó para nosotros fue con esas trágicas imágenes de los refugiados sirios que huyen de su país en botes, y de la impactante, perturbadora y grotesca imagen de ese niño flotando en la costa” el 3 de septiembre.

“En ese momento, comenzamos a considerar entre nosotros cuál iba a ser nuestra respuesta”, dijo Serano.

Esa resolución no ha cambiado, a pesar del clima de temor provocado por los ataques del 13 de noviembre, que mataron al menos a 129 personas e hirieron a muchas otras. “Estamos al otro extremo del espectro, diciendo que recibiremos a estos individuos y a estas familias”, dijo Serrano. “Reconocemos que estos refugiados no son los extremistas islámicos que han participado en estos ataques. Ellos son también personas que están padeciendo ese extremismo y son las víctimas de ese extremismo, y necesitan a alguien que esté con ellas y responda por ellas”.

Llamados a la justicia en medio de un clima de temor

Más de la mitad de los gobernadores de EE.UU. puede proponerse rechazar a los refugiados sirios, pero los episcopales rechazan esa actitud, diciendo que acoger al extranjero es ahora más esencial que nunca antes.

Wendy Johnson, encargada de comunicaciones del Ministerio Episcopal de Migración, dijo que 175 personas participaron en un seminario en la web el 19 de noviembre para explorar cómo los episcopales podían intervenir; otro seminario está programado para el 23 de noviembre.

“Debemos hacer oír nuestras voces”, dijo Deborah Stein, directora del Ministerio Episcopal de Migración, durante el seminario en la web. Ella hizo notar que la Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó por 289 votos a favor y 137 en contra una medida que podía limitar el reasentamiento e impedirles la entrada en el país a sirios e iraquíes. Cuarenta y siete demócratas se unieron a la votación. El presidente Obama ha dicho que vetaría el proyecto de ley si llega a aprobarlo el Senado.

Voluntarias intentan confortar a una siria embarazada poco después de llegar en una balsa a la isla griega de Lesbos el 17 de noviembre. Foto de Yannis Behrakis/Reuters.

Voluntarias intentan confortar a una siria embarazada poco después de llegar en una balsa a la isla griega de Lesbos el 17 de noviembre. Foto de Yannis Behrakis/Reuters.

Un mensaje por Twitter de la Casa Blanca en #RefugeesWelcome hacía notar que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados había referido 23.092 refugiados sirios al Programa de Admisión de Refugiados de EE.UU., de los cuales el Departamento de Seguridad Nacional sólo había intervenido a 7.014 refugiados desde 2011. Desde el año fiscal 2011, sólo 2.034 refugiados sirios habían sido admitidos en Estados Unidos, de los cuales ninguno ha sido arrestado o removido por cargos de terrorismo.

Stein dijo haber oído de algunos afiliados locales que el clima de temor provocado por los ataques en París ha dado lugar que algunos refugiados teman por su seguridad en Estados Unidos. “Estamos preocupados de que no estén siendo bien recibidos aquí y que esto los traumatice aún más”.

Pero Michael B. Curry, obispo primado de la Iglesia Episcopal, aconseja “No temáis” y en todas partes los obispos de la Iglesia están haciendo oír sus voces, e instando a los funcionarios públicos a honrar los valores éticos y morales, y alentando al electorado a recordar sus raíces religiosas”.

Alan Gates, obispo de Massachusetts, junto con su obispa sufragánea Gayle Harris, y el obispo de Massachusetts Occidental Doug Fisher, se unieron a otros líderes religiosos frente a la decisión del gobernador Charlie Baker: “Estamos preparados para recibir y apoyar a refugiados sirios”, según la carta enviada el 18 de noviembre por el Consejo de Iglesias de Massachusetts.

“Nuestras iglesias están en cada ciudad y pueblo de Massachusetts”, continúa diciendo la carta. “Creemos en una mancomunidad y en una nación que vive conforme a nuestros más profundos valores, no [según] nuestros temores. Acogemos con agrado la oportunidad de reunirnos con usted y planear la estrategia para el reasentamiento de los que huyen de la violencia en Siria”.

Refugiados y migrantes, principalmente de Siria, Afganistán, Bangladesh y Pakistán, pasan, el 23 de octubre, a través de Eslovenia en su camino a Alemania. Foto de Robert Cotič vía Wikimedia Commons.

Niños refugiados sirios en un bloque de apartamentos a medio construir en Reyfoun, el Líbano, cerca de la frontera con Siria, hacen el signo de la paz. Las familias huyeron de Siria debido a la guerra y ahora viven en un sitio en construcción. Foto de Eoghan Rice/Trocaire vía Wikimedia.

El obispo de Arizona Kirk Smith cuestionó la autoridad del gobernador Doug Ducey para limitar la entrada en el estado no sólo de los sirios, sino de todos los refugiados. “Nosotros los cristianos no podemos entregarnos a esa especie de sed de venganza que parece recorrer nuestro país en respuesta a los ataques del EI en Francia, Egipto y Líbano esta semana”, dijo él. “Tenemos una larga tradición bíblica de ayudar al indigente y a los refugiados”.

De manera semejante, Todd Ousley, obispo de Michigan Oriental, calificó el “intento del gobernador Rick Snyder de bloquear la aceptación de refugiados más allá de la autoridad de su cargo… una reacción basada en el temor a una serie muy compleja de intereses políticos y humanitarios. Como cristianos en la tradición episcopal, nuestro amor de Dios nos compele a amar a nuestro prójimo y Jesús nos enseña que los actos de misericordia demuestran nuestra propia buena vecindad”.

Scott Mayer, el obispo provisional de Fort Worth, también alentóa los políticos “a mantenerse firmes en el poder del Espíritu Santo y en la promesa de nuestro Señor Jesús”.

“Insto a los episcopales a encontrar modos de ayudar a los refugiados en sus comunidades. Oren por ellos. Y dejen que vuestras manos sean las manos de Jesús. Que vuestras sonrisas muestren el amor acogedor de Jesús, vuestro valor en presencia del miedo copie el valor de Jesús, vuestra apacible confianza en que todo coopera para el bien brille como la de Jesús. Porque al igual que María, al igual que usted y yo, los refugiados llevan consigo la imagen de Dios, un Dios que espera nacer de nuevo en esta Navidad”.

Servicio Interreligioso de Refugiados e Inmigración: muchas maneras de ayudar

Para Manser, del IRIS, las horas son largas e impredecibles, pero gratificantes. Llegan a 10 los casos del que se ha ocupado en noviembre, sin incluir los casos que aún supervisa de meses anteriores.

Los recién llegados son jóvenes y viejos, familias de cinco miembros, individuos solteros, parejas de ancianos. Algunos son cristianos, algunos, musulmanes, de Irak, Irán, Afganistán, Siria, algunos desplazados durante años, algunos provienen de campamentos o de zonas urbanas, todos a la espera de la oportunidad de comenzar de nuevo.

“Cada refugiado tiene su propia historia” y los asistentes sociales de IRIS los ayudan durante 90 días, brindándoles orientación cultural y clases de idioma inglés, y transporte, adiestramiento laboral y búsqueda de ayuda, evaluaciones físicas y mentales, control de casos y otros servicios sociales y locales.

Hace tres años, Manser, de 32 años, acaba da llegar de Bagdad.

Refugiados y migrantes, principalmente de Siria, Afganistán, Bangladesh y Pakistán, pasan, el 23 de octubre, a través de Eslovenia en su camino a Alemania. Foto de Robert Cotič vía Wikimedia Commons.

Refugiados y migrantes, principalmente de Siria, Afganistán, Bangladesh y Pakistán, pasan, el 23 de octubre, a través de Eslovenia en su camino a Alemania. Foto de Robert Cotič vía Wikimedia Commons.

Por hablar con fluidez inglés, turco, curdo, armenio y árabe, no tardo en ofrecerse como voluntario en IRIS, para asistir a otros refugiados con historias semejantes a la suya. Su propia historia, la única que él comparte sin problemas, incluye ayudar al ejército de Estados Unidos en Irak. Finalmente, recibió una visa especial a través de la embajada de EE.UU.

Meghan Tumilty, directora ejecutiva del IRIS, dijo que la agencia, que también está afiliada del Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados y al Servicio Mundial de Iglesias, reasentó 378 refugiados de octubre de 2014 a septiembre de 2015. “Alrededor del 75 por ciento eran minorías religiosas iraníes con nexos en Estados Unidos”, dijo ella. Otros incluían a refugiados de Irak, Afganistán, Cuba y la desaparecida Unión Soviética.

La agencia proyecta reasentar 530 refugiados en el actual año fiscal, entre ellos algunos provenientes de Siria. Ella añadió que aproximadamente el 50 por ciento de la población siria se ha visto desplazada por el conflicto; hay más de 4 millones de refugiados sirios en Turquía, Líbano, Jordania, Irak y otros países.

Aproximadamente el 76 por ciento son mujeres y niños “de manera que alrededor de 2 millones de niños han perdido todo lo que tenían”, dijo Tumilty.

Al igual que Todos los Santos, las comunidades de fe pueden asociarse para ayudar a amueblar apartamentos, pero hay otros muchos medios de apoyar a los refugiados, incluido el transporte de ida y vuelta a sus citas, tutoría, el compartir comidas, la donación de mochilas y a menudo continuar la relación más allá de los seis meses previstos.

A los que estén interesados en ofrecerse de voluntarios se les pide que se conecten con los afiliados locales, los cuales pueden encontrarse en la página web del Ministerio Episcopal de Migración. Además, entre los materiales educativos y de información disponibles se encuentra “Llamados a la transformación” a través de la Agencia Episcopal de Ayuda y Desarrollo.

“Es importante como episcopales (que acojamos) al extranjero”, dijo Tumilty.

– La Rda. Pat McCaughan es corresponsal de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri.


Tags