El Consejo trata de dar esperanza y liderazgo ‘a los que no están a la mesa’

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Feb 10, 2014

[Episcopal News Service – Linthicum Heights, Maryland] Los dominicanos de ascendencia haitiana, la trata de personas y los nombres “peyorativos” de equipos deportivos se encontraron entre los temas que el Consejo Ejecutivo de la Iglesia Episcopal abordó el 7 de febrero durante las ultimas sesiones de su reunión en esta ciudad.

El Consejo declaró su solidaridad con los dominicanos de ascendencia haitiana, quienes “han sido convertidos esencialmente en apátridas” cuando el tribunal constitucional de la República Dominicana dictaminó, el 23 de septiembre de 2013, que cualquier niño nacido de inmigrantes haitianos en la República Dominicana no tenía derecho a la ciudadanía. El tribunal también le ordenó a las autoridades dominicanas que auditaran los registros civiles hasta junio de 1929 para determinar, según informa el diario New York Times quien carece de derecho a la ciudadanía.

Diciendo que el dictamen del tribunal podría dar lugar a una “tragedia potencial en gran escala”, la resolución del Consejo insta a la Oficina de Relaciones Gubernamentales de la Iglesia a alentar a Estados Unidos y los asociados ecuménicos e interreligiosos de la iglesia a que aboguen a favor de esos dominicanos.  [La resolución] insta también a la Red Episcopal de Política Pública de esa oficina a educar y alertar a los miembros de la Iglesia respecto a ese problema, y a alentar la defensa [de esa causa] dentro de sus iglesias y comunidades.

También animaba a la obispa primada Katharine Jefferts Schori a encabezar una delegación que fuera a la República Dominicana, junto con asociados ecuménicos e interreligiosos, a recabar información precisa para luego informar al Consejo.

El Rvdmo. Julio Holguín, obispo de la Diócesis [Episcopal] de la República Dominicana le dijo a ENS poco después de darse a conocer el dictamen del tribunal que “el tribunal constitucional ha cometido un gran error con este fallo, señalando que muchos de los afectados eran descendientes de inmigrantes, la mayoría de los cuales vinieron a la República Dominicana por acuerdo de los dos gobiernos —dominicano y haitiano— para trabajar principalmente en el corte de caña.

Debe coordinarse la labor sobre la trata de personas

El Consejo aprobó ratificar el compromiso de la 77ª. Convención General de combatir la trata de personas tal como quedo explícito en la Resolución D-042. Lelanda Lee, presidente del Comité Permanente Conjunto de Promoción Social e Interconexión, dijo que había llegado a ser obvio para ese comité que la labor que se necesitaba respecto a ese problema es tan compleja que se precisaba de un comité que la coordinara.

La resolución instruía a la Obispa Primada y a la presidente de la Cámara de Diputados a nombrar el comité para el 31 de marzo “a fin de garantizar la implementación, efectiva, concienzuda y cooperativa, de las políticas adoptadas por la 77ª. Convención General”.

Lee dijo que la resolución encaja con lo que el comité cree que es su papel de “brindarle esperanza y liderazgo a los que no se encuentra a la mesa”.

Nombres de equipos ‘peyorativos o denostativos’

En otra resolución auspiciada por el Comité Permanente Conjunto sobre Promoción Social e Interconexión, el Consejo se sumó a lo que ya se ha convertido en una campaña nacional que ha llegado hasta la Casa Blanca de convencer al equipo de los Pieles Rojas [Redskins] de Washington de que cambie de nombre.

La resolución denuncia el uso de “equipos deportivos con nombres peyorativos o denostativos”, recordándole a la Iglesia su compromiso del pacto bautismal, de luchar por la justicia y la paz entre todos los pueblos y respetar la dignidad de todo ser humano. Los miembros [del Consejo] sostuvieron su llamado a ponerle fin al uso de tales nombres como parte del empeño de la Iglesia, a lo largo de muchos años, en combatir el racismo.

La resolución le pide a las organizaciones atléticas en todos los niveles a seguir la política de la Asociación Nacional Atlética Universitaria de penar los programas deportivos universitarios que usen nombres de equipos, imágenes, mascotas y conductas peyorativos o denostativos. Los miembros también le pidieron a las diócesis e iglesias locales que aborden el asunto de los nombres de equipos peyorativos o denostativos si sus equipos deportivos de escuelas y comunidades locales usan tales nombres.

La resolución insta también a la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) a “no permitir que un evento importante de fútbol americano, como el Súper Tazón, tenga lugar en Washington, D.C.”.

Terry Star, miembro del Consejo e indoamericano lakota proveniente de Dakota del Norte, le agradeció al Consejo, a través de sus mensajes en Twitter, su preocupación por el uso de tales nombres.

“Yo he estado luchando con este problema desde que estaba en la escuela secundaria hace 22 años”, dijo él.

Plan de sostenibilidad para la IX Provincia

El Consejo convino en una campaña de 18 años que un informe define como “un plan audaz con el valioso objetivo de establecer modelos de misión y ministerio sostenibles y autosuficientes para las diócesis de la IX Provincia”.

Martha Gardner, que preside el  Comité Permanente Conjunto sobre Misión Mundial del Consejo, dijo que el problema de la sostenibilidad “había estado surgiendo a lo largo de muchos años”.

El equipo del proyecto Segunda Marca de la Misión del personal denominacional recomendó el plan al Consejo con la sugerencia de que se concentrara en las diócesis que ya han avanzado en sus gestiones de superar la dependencia del modelo histórico de las subvenciones en bloque de la Iglesia. La Diócesis de la República Dominicana, con su objetivo autodefinido de lograr la autosuficiencia para 1015, será el foco inicial, seguida por la Diócesis de Honduras y luego la de Colombia.

En la medida en que cada diócesis alcance la autosuficiencia del programa de subvenciones en bloque, se comprometerá a su vez en trabajar con las otras diócesis para ayudarles a alcanzar el mismo objetivo.

“El compromiso general del dinero de la subvención en bloque del presupuesto denominacional se mantendría a fin de proporcionar réditos para esta labor de desarrollo, y para que a la próxima diócesis que le toque en turno se comprometa a fondo en la labor de la autosuficiencia y la sostenibilidad”, dijo el equipo en su informe.

El equipo dijo también que tal proyecto a largo plazo exigirá “compromiso, confianza y flexibilidad” según “el panorama y las realidades puedan ajustarse y cambiar a lo largo del tiempo”, lo cual exigiría alguna especie de acuerdo pactado susceptible de renovarse mediante una renegociación periódica.

En otros asuntos, el Consejo:

*Dio su consentimiento a la selección hecha por el Comité Permanente Conjunto sobre Planificación y Disposiciones acerca de la selección de la Diócesis de Texas como el sitio para la celebración de la 79ª. Convención General en 2018.

La selección debe ser aprobada también por la 78ª. Convención en Salt Lake City en 2015.

El Rdo. Canónigo Michael Barlowe, funcionario ejecutivo de la Iglesia, respondió las preguntas de los miembros respecto a celebrar la convención en una diócesis que históricamente ha estado entre aquellas que dan una pequeña cantidad de sus ingresos al presupuesto denominacional. Él dijo que antes de incluir la diócesis en la lista de posibles lugares, él y la Obispa Primada y la presidente de la Cámara de Diputados hablarían con el obispo Andy Doyle y se impondrían de su “compromiso personal… en conducir la Diócesis de Texas hacia la plena participación en la vida de la Iglesia Episcopal incluido el cumplimiento con sus responsabilidades económicas y de otro tipo”.

Ese compromiso, agregó, se reiteró durante las reuniones entre el grupo que selecciona los sitios [de la Convención] y el liderazgo diocesano. “Nos sentimos satisfechos de que hemos explorado esto en detalle”, dijo Barlowe, añadiendo que el Comité Permanente está “encantado” con la “trayectoria” de participación que se le explicó.

La Iglesia Episcopal le pide a las diócesis que contribuyan al presupuesto denominacional con el 19 por ciento de sus ingresos anuales. La contribución anual en el presupuesto trienal se basa en el ingreso de la diócesis dos años antes, menos $120.000.

En 2013, Texas había prometido un 6,7 por ciento ($463,959 de sus $7,094,500 de ingresos); según información que puede encontrarse aquí, y que debe aprobarse este fin de semana, aparece una promesa para 2014 de $755.338.

La última vez que la Convención General se reunió en una diócesis de la VII Provincia fue en 1970, lo cual es un hiato más largo que para cualquier otra provincia, agregó Barlowe.

Puede encontrarse aquí más información sobre la selección.

* Autorizó gastos hasta de $95.000 para peritaje profesional adicional a fin de ayudar en la revisión y el análisis de futuras acciones relacionadas con el Centro denominacional de la Iglesia Episcopal en Nueva York. La decisión se produjo después de que el Consejo se reuniera en sesión ejecutiva para escuchar un informe de un subcomité suyo que está explorando el asunto.

La Resolución D016 de la Convención General, aprobada en julio de 2012, decía que “es la voluntad de esta Convención mudar las oficinas centrales del centro denominacional” de ese edificio.

Hace un año, el Consejo recibió un informe que decía que “la misión reconciliadora de Dios se promueve mejor” quedándose en el 815 de la Segunda Avenida en Manhattan y consolidando las operaciones de la DFMS en el centro denominacional de la Iglesia mediante la liberación de más espacio que los 3,5 pisos que ya están alquilados, para  cederlos a inquilinos de afuera. Esta opción favorecería, según el informe, “los mejores intereses de la organización en el orden económico, tanto en lo que respecta al presupuesto como a lo fines de la inversión a largo plazo”.

La Sociedad Misionera Nacional y Extranjera (DFMS), la entidad corporativa de la Iglesia, alquila actualmente 2,5 pisos al Ad Council, un piso a la Misión Permanente de Haití ante las Naciones Unidas y un piso a la Escuela Internacional Liceo Kennedy [Lyceum Kennedy International School]. El centro denominacional cuenta con 9 pisos de espacio de oficinas.

El estudio que hizo el informe comenzó en febrero de 2012, cinco meses antes de que se reuniera la Convención General, cuando el Comité de Finanzas para la Misión del Consejo le pidió a la gerencia de la DFMS que estudiara la posible reubicación del centro denominacional. El Grupo de Supervisión Ejecutiva [Executive Oversight Group] integrado por 10 personas, llevó a cabo el estudio.

* Convino en sacar al mercado un espacio de estacionamiento en Austin, Texas, que se compró en 2009 como un sitio posible para reubicar los Archivos de la Iglesia Episcopal. Los archivos se encuentran actualmente en el campus del Seminario del Sudoeste, cerca de Austin. Los ingresos devenidos del espacio de estacionamiento han cubierto el interés del préstamo y han permitido reembolsar algo del capital. La propiedad “no es probable que sea del mayor interés financiero de la Sociedad” pero ha aumentado en valor desde la compra, según explica la resolución.

El Consejo aprobó una resolución afín en que solicita que un grupo de trabajo renueve sus empeños a fin de encontrar una ubicación idónea para los Archivos.

El resumen de cada resolución aprobada por el Consejo se encuentra aquí.

Algunos miembros del consejo enviaron mensajes por Twitter desde la reunión valiéndose del código #ExCoun.

El Consejo Ejecutivo lleva a cabo los programas y políticas adoptadas por la Convención General, según el  Canon I.4 (1) (a). El Consejo está compuesto de 38 miembros, 20 de los cuales (cuatro obispos, cuatro presbíteros o diáconos y 12 laicos) son elegidos por la Convención General, y 18 por los nueve sínodos provinciales (un clérigo y un laico cada uno) por períodos de seis años, además del Obispo Primado y el Presidente de la Cámara de Diputados [que son miembros ex oficio].

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducción de Vicente Echerri


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