[25 de abril de  2013] En los próximos cuatro meses – del 1 de mayo al 31 de agosto – la Iglesia Episcopal será testigo de la consagración de dos obispos, la elección de dos obispos y el progreso del proceso de consentimiento canónigo de dos obispos electos.

Consagraciones
Dos consagraciones de un obispo fueron programadas para mayo hasta agosto. La obispa presidente Katharine Jefferts Schori presidirá el servicio de ordenación.

15 de junio: Consagración sufragánea en la Diócesis de Carolina del Norte – La Rda.  Anne Hodges-Copple fue elegida el 25 de enero (se encuentra pendiente la terminación exitosa del proceso de consentimiento canónico)

20 de julio: Consagración en la Diócesis del Sudoeste de Virginia, el Rdo. Mark Bourlakas fue elegido el 9 de marzo (se encuentra pendiente la terminación exitosa del proceso de consentimiento canónico)

Elecciones
Durante los meses de mayo y agosto, se han programado dos elecciones de obispos.

4 de mayo: Diócesis de Nueva Jersey 

18 de mayo: Diócesis del Oeste de Michigan

Proceso de consentimiento canónico
El proceso de consentimiento canónico se encuentra actualmente en progreso para dos obispos electos. Las fechas límites son:

9 de julio:  la Rda. Anne Hodges-Copple elegida Obispa Sufragánea de la Diócesis deCarolina del Norte el 25 de enero.

10 de agosto:  El Rdo. Mark Bourlakas elegido Obispo de la Diócesis del Sudoeste de Virginia  el 9 de marzo.

Resumen del proceso
Tras la elección el candidato elegido es un obispo electo. Después de algunas cuestiones del procedimiento incluyendo exámenes, se envían avisos formales a los obispos con jurisdicción (solo obispos diocesanos) y avisos separados a los comités permanentes de cada una de la diócesis de la Iglesia Episcopal. Estos avisos requieren sus propias acciones y firmas.

Para que un obispo electo se convierta en obispo, de acuerdo a los cánones de la Iglesia Episcopal III.11.4, 6, la mayoría de los obispos con jurisdicción Y la mayoría de los comités permanentes diocesanos deben dar consentimiento a la ordenación del obispo electo dentro de 120 días de haber recibido el aviso de la elección. Estas medidas son realizadas por separado.

Una vez que la obispa presidente reciba los consentimientos necesarios, ella deberá “sin demora” avisar a la diócesis electa y al obispo electo sin esperar a que se pase el período de los 120 días, y “deberá” tras la aceptación del obispo electo, “tomar órdenes para la ordenación”.

Sin embargo, si la mayoría de los obispos diocesanos no da su consentimiento. y/o la mayoría de los comités permanentes no otorga el consentimiento, la Obispa Presidente, de acuerdo con los cánones III.11.5, deberá declarar la elección nula y sin validez. En esos casos, una persona elegida por la diócesis no será ordenada.