Resumen del Consejo Consultivo Anglicano: 29 de octubre

Por Mary Frances Schjonberg
Posted Oct 30, 2012

[Episcopal News Service – Auckland, Nueva  Zelanda] Muchas cosas ocurren cada día durante la 15a. reunión del Consejo Consultivo Anglicano (ACC). Además de la cobertura regular de Episcopal News Service, he aquí algunas de las otras cosas que siguieron del 28 al 29 de octubre (hora local).

Jóvenes autores anglicanos presentan un libro sobre la misión como “enriquecedora de la vida”.
El arzobispo de Cantórbery, Rowan Williams lanzó oficialmente el  libro Life-widening Mission: Global Anglican Perspectives [Misión enriquecedora de la vida: Perspectivas anglicanas mundiales] al que llamó una nueva hoja de ruta para la misión en la Comunión Anglicana.

El libro consiste en una colección de reflexiones y perspectivas de un grupo de jóvenes anglicanos compiladas después de que asistieran a Edimburgo 2010, un evento que conmemoró la histórica Conferencia Ecuménica de Edimburgo de 1910. Los ensayos se escribieron a partir de los antecedentes contextuales personales de los asistentes y a la luz de las Cinco Marcas de la Misión de la Comunión Anglicana.

Jóvenes anglicanos de Brasil, Canadá, África Central, Hong Kong, Kenia, África del Sur y la Iglesia Episcopal de Estados Unidos escribieron la mayoría de los capítulos. Cathy Ross de Nueva Zelanda editó la colección.

“Teníamos una visión común…de cómo resultar eficaces en la misión de Dios”, dijo la Rda. Irene Ayallo, de Kenia, una de los autores, durante el lanzamiento.

Williams dijo que hasta ahora la mayoría de los mapas usados para señalar el curso de la misión en la Comunión Anglicana habían sido trazados “en gran medida por hombres mayores de 55 años, en gran medida por hombres ordenados mayores de 55 y en gran medida por hombres ordenados mayores de 55 años con una tez ligeramente más pálida” que la mayoría de las personas del mundo. Él resaltó que esas hojas de ruta tradicionales “no siempre lo llevaban a uno a la meta porque los sucesos resultan cambiantes sobre el terreno”.

Recurriendo a un tema del que había hablado antes en la reunión del CCA, Williams dijo que los jóvenes no son el futuro de la Iglesia, sino que, por el contrario, son el presente de la Iglesia. Y los jóvenes escritores cuyos textos aparecen compilados en este libro sobre la misión muestran que el contingente juvenil de la Comunión “está haciendo sus propios mapas, y trazando su propio rumbo”, no en rebelión contra la tradición, “sino sencillamente progresando con ella”.

Todas las provincias aceptaron la invitación del CCA; todas excepto una están representadas.
Kenneth Kearon, el secretario general de la Comunión Anglicana, dijo en un encuentro informativo con la prensa el 29 de octubre (hora local) que si bien ninguna provincia se ha quedado oficialmente fuera de la reunión del CCA15, faltan algunas personas.

El Servicio de Noticias de la Comunión Anglicana [Anglican Communion News Service] informó que de 87 delegados, 10 no se encuentran presentes aún. Entre éstos se incluyen tres miembros de Uganda y uno de cada una de las provincias del Congo, Irlanda, Norte de la Inda, Filipinas, Tanzania y de los invitados por el comité Permanente de la Comunión Anglicana para garantizar la diversidad de la membresía del Consejo. Algunos de esos siete se encuentran todavía de viaje, si bien otros declinaron la invitación debido a razones personales o administrativas, o por problemas de visado.

“No hay ninguna provincia que se haya quedado fuera” dijo Kearon.

La Iglesia de la Provincia de Uganda no está representada en la reunión, pero sólo porque se olvidó de elegir a sus miembros, apuntó él. La provincia debió haber elegido a sus tres miembros este verano pasado en la misma reunión en que resultó electo el Rvdmo. Stanley Ntagali como el 8vo. arzobispo de la Iglesia de Uganda.

“Hubo la intención; lo cual es bueno”, dijo Kearon. “Pero siento genuinamente que no vinieran porque existe el antecedente de una historia para eso”.

Esa historia incluye la decisión de Uganda de boicotear la reunión decenal de los obispos de la Comunión en 2008 porque el arzobispo de Cantórbery Rowan Williams había invitado a los obispos de la Iglesia Episcopal. Los obispos ugandeses manifestaron su objeción debido a recientes acontecimientos de la Iglesia Episcopal y a decisiones tomadas por ésta, entre ellas la de permitir en 2003 que su diócesis de Nueva Hampshire ordenara y consagrara a Gene Robinson como su obispo.

Los anglicanos ugandeses se vieron involucrados en una polémica en la última reunión del CCC que tuvo lugar en Jamaica en 2009, cuando a Philip Ashey, ex sacerdote de la Iglesia episcopal que fue aceptado en la Iglesia de Uganda en 2005, no se le permitió que participara como delegado de Uganda porque, según dijo en ese tiempo el Comité Permanente, su relación con la provincia del este de África es “resultado de una intervención interprovincial”.

Y Uganda fue también una de las siete provincias que boicoteó la Reunión de los Primados en enero de 2011.

Una lista de todos los miembros del CCA aparece aquí.

Un código de conducta para el Consejo
Todos los miembros del Consejo recibieron un código de conducta tocante a comportamientos discriminatorios, acoso y acoso sexual. El personal de la Oficina de la Comunión Anglicana redactó el código para usarlo en todas las reuniones oficinales de la Comunión.

El código compromete a la Comunión a garantizar que las reuniones se celebren “en un ambiente de hospitalidad y seguridad” y declara que “la conducta discriminatoria, incluido el acoso de cualquier clase —sexual, étnico, basado en la clase, relacionado con la edad o de cualquier otro tipo, no ha de ser tolerado”.

Entre sus principios, el código le pide a los participantes de la reunión que se comporten respetuosamente hacia los demás,  que no abusen de sus relaciones, “sean honestos con ustedes mismos y con los demás respecto a sus límites personales”, sean sensibles a las diferencias sociales y culturales y “estén prestos a disculparse” si alguien cree que la conducta de uno ha resultado ofensiva o ha sido malentendida.

El código, con una extensión de tres páginas, bosqueja también el papel de los responsables de abordar los casos de acoso que se reporten.

Kearon dijo al Consejo el 29 de octubre que le habían preguntado si los miembros podrían poner en vigor el código de conducta en sus diócesis y provincias.

“Nos alegra de que lleven eso de vuelta a sus provincias”, dijo él, advirtiendo, sin embargo, que algunas formulaciones específicas habían sido examinadas por abogados del Reino Unido para ajustarlas al derecho local y que los miembros deben procurar asesoría legal para estar seguros se ajusta a las leyes en sus jurisdicciones.

No obstante, agregó él, el código “debería ser el punto de partida para un diálogo en su provincia”.

Toda la cobertura de ENS del CCA15 se encuentra aquí.

– La Rda. Mary Frances Schjonberg es redactora y reportera de Episcopal News Service. Traducido por Vicente Echerri.